Juan Carlos G. Partida - LA JORNADA JALISCOTomatlan, 18 de marzo.- Aunque en el discurso y en las respuestas a los reporteros hablan de prudencia, trascendió que el gobierno de Jalisco, en conjunto con el de Cihuatlán, echarían abajo el espectacular que desde la semana pasada fue colocado por el gobierno de Colima en la zona en litigio territorial en El Rebalse, el cual reza: “La Culebra en Manzanillo, Colima”, en una clara provocación que fue calificada por una fuente oficial como “una verdadera chingadera”.
La fuente consultada señaló que lo más probable es que el derribo del espectacular colocado por el gobierno colimense fuera tumbado, con apoyo de policías de Cihuatlán y estatales, durante la noche de este martes, o bien, por la madrugada de hoy miércoles, lo que anticipaba el regreso de la tensión en toda forma a esa zona de la costa sur del estado, debido a que también policías municipales de Manzanillo y estatales de Colima están permanentemente colocados en el lugar, donde desde hace semanas se detuvieron las obras de introducción de agua potable que promovía el Ayuntamiento de Cihuatlán.
Entrevistado en la gira que este martes tuvo por Tomatlán, el gobernador Emilio González Márquez dijo que se trataba de una evidente provocación y que “nosotros vamos a ver a través de distintos medios para que esto se retire”.
“Yo estoy seguro que habrá prudencia por parte de los actores de Colima para que se puedan retirar y no se caliente un ambiente que por momentos pareciera estar más tranquilo. Si vimos ayer (el lunes) esto, que evidentemente es una provocación y que es justo cuando saben que estaremos por la región, es una prueba nuevamente que es gente de Colima la que quiere que este tema viva a niveles de conflicto y no de solución”, agregó.
González Márquez dijo que “estaremos pronto” en contacto con el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, para retomar las conversaciones y lograr acuerdos a la espera de que “ésta sea la definitiva”.
Cuestionado sobre la pasividad de que se le ha acusado al gobierno estatal, lo que ha permitido la realización de obras públicas y ahora hasta la colocación de espectaculares en las zonas en conflicto, el gobernador jalisciense dijo que no cree que sea el momento para encabezar acciones que luego se tomen como una provocación.
Reconoció que no ha hablado recientemente con el gobernador colimense, Silverio Cavazos, a quien acusó de tener “una visión patrimonialista de una región que es México en donde parecería que intereses particulares están por encima del bien colectivo. Evidentemente es irregular, presión a la gente y totalmente inadecuado lo que está haciendo la gente de Colima”.
Afirmó que reforzar con presencia policial la zona de límites no le parecía ni lo más inteligente ni lo más conveniente.
“No se trata de ver quién viola más los acuerdos, Jalisco tiene palabra y la cumple. No se trata de ver quién tiene más policía, cuando hubo necesidad de enviar policía lo hicimos y la presencia de Jalisco fue impactante. No nos gusta eso, no creemos que para eso sea la policía, nosotros seguiremos honrando los acuerdos y a través de la Segob en diálogo para que esto se resuelva, esperando que pronto cambie el mecanismo de solución en los límites, porque queda de manifiesto que al Senado se le complica, por su composición política, resolver temas como éste. Nuestra posición es que regrese a la Corte y creemos que ahí es donde debe estar”, reiteró.
Dijo que el tema no se ha platicado todavía con Mouriño porque no se había presentado una situación de tensión como la surgida a raíz del espectacular. Y señaló que lo importante es regresar al acuerdo vigente con la presencia de elementos de la Policía Federal Preventiva en las zonas en conflicto.
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