sábado, 31 de mayo de 2008

Pide OMS veto total a publicidad del tabaco

Las compañías apuntan a los jóvenes como su principal mercado, dice. Con sus mensajes, la agencia quiere proteger a mil 800 millones de chicos.


El Ministerio de Salud de Brasil lanzó una campaña muy gráfica sobre las consecuencias de fumar. Foto: Ministerio de salud de Brasil/EFE

PÚBLICO - AGENCIAS

La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó un llamado global a que se prohíba toda la publicidad, promoción y patrocinio del tabaco para evitar que las personas jóvenes comiencen a fumar.

Con esta nueva campaña, la OMS dijo que aspira a proteger a mil 800 jóvenes de todo el mundo, que son hoy día foco de los multimillonarios presupuestos publicitarios de la industria tabacalera.

Sólo 5 por ciento de la población mundial está protegida por prohibiciones amplias a la publicidad de tabaco, lo que deja expuesto a 95 por ciento restante, señaló la OMS.

En la víspera del Día Mundial sin Tabaco, que se celebra cada 31 de mayo, la agencia de las Naciones Unidas indicó que las sofisticadas técnicas de mercadeo usadas en revistas, películas, internet y conciertos y eventos deportivos estaban atrapando a los jóvenes.

“Cuanto más están expuestas a la publicidad del tabaco, las personas jóvenes son más propensas a comenzar a fumar”, señaló la OMS, que además acusó a los fabricantes de cigarrillos de “un uso de los productos del tabaco falsamente asociado con cualidades como el glamour, la energía y el atractivo sexual”.

Los responsables de la OMS fueron muy tajantes en sus mensajes sobre el tema.

Douglas Bettcher, director de la Iniciativa Libre de Tabaco, de la OMS, mencionó que “la industria del tabaco emplea estrategias de mercadeo depredatorias para enganchar a los jóvenes a su droga adictiva”.

Estas tácticos, dijo Bettcher a periodistas, están “enfocadas con mucha, mucha precisión para capturar y atraer a los jóvenes, en particular como fumadores de reemplazo para quienes han muerto o dejan de fumar, de modo que puedan seguir extrayendo su rentabilidad”.

Las compañías tabacaleras están atacando en particular al mundo en desarrollo y especialmente a las jovencitas, como “carne de cañón fresca”, agregó el funcionario.

“Los vetos amplios a la publicidad sí funcionan, reduciendo el consumo de tabaco en hasta 16 por ciento en países que ya han adoptado este paso legislativo”, dijo el jefe de la iniciataiva antitabaco de la OMS.

“Las medidas a medias no bastan”, añadió Bettcher. “Cuando se prohíbe una forma de publicidad, la industria tabacalera simplemente transfiere sus enormes recursos a otro medio. Exhortamos a los gobiernos a imponer una prohibición completa para romper la red del mercadeo tabacalero”, sostuvo.

“Hay una nube de tormenta en el horizonte con las jóvenes aumentando las tasas de fumadores”, según Bettcher. “Podríamos perder mil millones de personas este siglo y son muertes inútiles porque las muertes relacionadas con el tabaco son obra del ser humano”.

También la directora general de la agencia, Margaret Chan, fue dura en sus palabras: “A fin de sobrevivir, la industria tabacalera necesita sustituir con nuevos consumidores jóvenes a quienes abandonan el tabaco o mueren.

“Para ello ha creado una compleja red de mercadeo tabacalero que atrapa a millones de jóvenes de todo el mundo, con consecuencias sanitarias potencialmente devastadoras.

“La prohibición de toda publicidad, promoción y patrocinio del tabaco constituye un instrumento poderoso que podemos utilizar para proteger a los jóvenes del mundo”, añadió la directora general.

La mayoría de los fumadores inicia el hábito antes de los 18 años y casi un cuarto de los nuevos fumadores son menores de 10, según datos de la agencia de salud.

En un sondeo con jóvenes de todo el mundo de entre 13 y 15 años, la OMS indicó que 55 por ciento manifestó haber visto publicidades de cigarrillos en carteleras el mes previo a la consulta y 20 por ciento poseía algo con el logotipo de alguna marca de cigarrillos.

En 2003, la OMS concretó el primer tratado global de salud pública que pautó la colocación de advertencias más grandes en los paquetes de cigarrillos y limitó la publicidad y el patrocinio, aunque esto no se puso en marcha en todos lados.

Casi dos tercios de los fumadores del mundo viven en 10 países: China tiene a casi
30 por ciento y la India a otro 10 por ciento; luego están Indonesia, Rusia, Estados Unidos, Japón, Bangladesh, Alemania y Turquía.

Entre los principales fabricantes de cigarrillos se encuentran Philip Morris, Imperial Tobacco, British American Tobacco y Japan Tobacco.

Cifras que aterran
Hay más de mil millones de fumadores en el mundo, y el uso de productos de tabaco va al alza. Aunque se encuentra a la baja en los países ricos, el tabaquismo está emigrando a los que están en desarrollo.

El tabaco mata a 5.4 millones de personas por año, una persona cada seis segundos. El hábito mata a casi la mitad de quienes lo practican.

En el siglo XX, el tabaco causó 100 millones de muertes. Si las tendencias actuales continuaran sin cambios, en el siglo XXI se contabilizarían mil millones de muertes debidas al tabaco.

Una estrategia de seis puntos
Para combatir el tabaquismo la Organización Mundial de la Salud lanzó la iniciativa MPOWER, un acrónimo que representa a la palabra “empower”, alusiva al hecho de que se busca dar a cada persona el poder de dejar el hábito.

MPOWER comprende las seis políticas más importantes y efectivas de control del tabaco: Monitorear, Proteger, Ofrecer ayuda, Advertir (Warn), Hacer cumplir (Enforce) y Aumentar los impuestos (Raise taxes) el tabaco.

Según la OMS, el paquete de políticas MPOWER puede revertir la epidemia del tabaco y prevenir millones de muertes relacionadas con el tabaco.

Como muestra del desequilibrio existente entre lo que se carga fiscalmente al tabaco y lo que se gasta en controlarlo, la OMS dice que los gobiernos recolectan cada año más de 200 mil millones de dólares en impuestos al tabaco, y gastan menos de la quinta parte del uno por ciento de ese total en medidas de control.

La Convención Marco sobre el Control del Tabaco, que entró en vigor el 27 de febrero de 2005, había sido firmada por 168 países. México la firmó el 12 de agosto de 2003 y la ratificó el 28 de mayo de 2004. La reafirmó ayer 30 de mayo de 2008 con la Ley General para el Control del Tabaco.

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