En el Itei, otra elección simulada por PAN y PRI

Sonia Serrano - PÚBLICO Con un abierto reparto de cuotas entre las fracciones de los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI), ayer se eligieron a los dos nuevos integrantes del Instituto de Transparencia e Información Pública (Itei). El blanquiazul decidió ratificar a Guillermo Muñoz Franco, y el tricolor dejó su posición a Guillermo García Murillo, una persona cercana al actual dirigente estatal, Javier Guízar Macías. Sobre García Murillo pesa una acusación de plagio en su tesis doctoral. La forma en que se dio el procedimiento de selección de los consejeros del Itei motivó que el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Enrique Alfaro Ramírez, abandonara la sesión; sin embargo, para que ésta no se interrumpiera, pidió ser sustituido por su compañero de bancada, Carlos Manuel Orozco Santillán. El presidente del Itei, Augusto Valencia López, presente en la sesión, lamentó la manipulación del proceso y adelantó que el organismo no tiene recursos para pagar el sueldo de los dos consejeros, que significará alrededor de 2.2 millones de pesos anuales. Sobre las razones por las que abandonó la sesión, Enrique Alfaro dijo que todo el trabajo que se llevó a cabo en la Comisión de Participación Ciudadana, incluidas las comparecencias de los candidatos, fueron sólo “simulación, porque al final decidieron los dirigentes del PRI y el PAN”. Agregó que, independientemente de la capacidad que puedan tener los dos consejeros electos, “el Congreso no está cumpliendo adecuadamente con su responsabilidad. La experiencia de hoy debería invitarnos a reflexionar sobre lo mal que estamos tomando las decisiones y la señal que estamos enviando a la gente”. Indicó que durante el proceso se señalaron serias irregularidades, como la exclusión de una de las aspirantes sólo por estar embarazada. Además, afirmó que la comisión nunca entregó una evaluación propia al pleno “y eso, para mí, es hacernos tontos solos”. Augusto Valencia afirmó que la sociedad ya está cansada de que los diputados “le tomen el pelo”.