miércoles, 3 de junio de 2009
Advierten problemas a la salud por agua embotellada
Alejandra Guillén . El Informador
El agua embotellada tiene a la gente entrampada… embotellada. Y es que a pesar de que es “el más grande vacío” en el tema de la privatización del agua, de que genera severos problemas ambientales por los millones de envases desechables, y de que puede haber riesgos a la salud por los lixiviados que generan los plásticos, el consumo sigue en aumento y en México no hay condiciones para tomar agua de la llave.
Esto lo explicó el lunes pasado el canadiense Tony Clarke, Premio Livelihood (conocido como el "Premio Nobel Alternativo"), durante su visita a Guadalajara, ciudad en la que eligió presentar su libro más reciente, ya que “Jalisco vive severos problemas con el tema del agua”.
El también director del Instituto Polaris de Canadá, que se vincula con organizaciones ciudadanas, trabajadores públicos y movimientos sociales de su país y de Estados Unidos, principalmente, expresó que actualmente hay cuatro grandes empresas que controlan el abasto del líquido vital en el mundo.
Los puntos más críticos en torno a este problema son: el robo por el precio de cada botella, que es miles de veces más caro; que las empresas crean estrategias que generan deseo para tener un mercado cautivo; que las botellas de plástico, cuando reciben radiación solar, generan gases de efecto invernadero y lixiviados que dañan tanto a mantos freáticos como a la salud de las personas; que los gobiernos no regulan la calidad del agua, que probablemente tiene microbios u organismos patógenos; y que explotan los recursos de comunidades rurales.
Tony Clarke concluyó diciendo que en el libro Embotellados, el turbio negocio del agua embotellada y la lucha por la defensa del agua, documenta también los procesos de resistencia de las poblaciones y cómo en su país han logrado tener “zonas libres” de estos productos.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario