Esperanza Romero - PÚBLICO
Central Park no es un proyecto virtual. Poco a poco, los promotores del que se anuncia como el desarrollo habitacional más exclusivo en la zona dorada de Guadalajara, en Colomos III, libran los obstáculos para la edificación de tres torres departamentales sobre el predio conocido como Charcos Azules: dentro del bosque.
La Dirección General de Ecología del Ayuntamiento de Zapopan emitió un dictamen de impacto ambiental favorable al proyecto hace ocho meses.
En tanto, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) han dado luz verde a los trámites correspondientes para la dotación de los servicios de agua potable y electrificación.
El predio originalmente fue vendido al gobierno del estado a sobreprecio, y luego éste lo devolvió con un cambio de uso de suelo otorgado por la pasada administración municipal de Zapopan.
Desde mayo de 2007 el Ayuntamiento de Zapopan congeló los permisos en la zona, con al intención de proteger Colomos III, también conocido como El Polvorín, ante la amenaza de los intereses inmobiliarios.
Los nuevos dueños han luchado con todo y contra todo. Está en juego un negocio de alrededor de cien millones de dólares. Central Park se pensó para una superficie de 20 hectáreas, con tres torres de 20 niveles y departamentos de dos y tres recámaras, con accesos privados, elevadores silenciosos de alta velocidad, estacionamientos subterráneos, casetas de vigilancia independientes para residentes y visitantes las 24 horas, terraza club y salón de juegos y todo el lujo y sofisticación “en equilibrio con la naturaleza”, según el eslogan publicitario (Público, 3 de marzo de 2008).
Justo Osorno Vizcaíno, director de Ecología y Fomento Agropecuario de Zapopan, dio su visto bueno en materia de impacto ambiental el pasado 3 de octubre, a pesar de que se trata de una zona de recarga de acuíferos. Allí se proyecta erigir vivienda vertical con base en un cambio de uso de suelo irregular, que abrió la posibilidad de edificar torres de hasta 40 pisos.
Fue en el periodo de Ismael Orozco Loreto como alcalde interino de Zapopan.El dictamen, del que Público tiene copia, señala que es un “visto bueno condicionado”, debiendo cumplir con información complementaria, como copias del dictamen de Trazos, Usos y Destinos para uso de suelo, emitido por Obras Públicas, y el proyecto de áreas verdes, autorizado por Parques y Jardines.Asimismo, se solicitan los oficios de factibilidad para suministro de agua potable, tratamiento y descargas de aguas residuales por parte del municipio.
La respuesta del funcionario va dirigida a Alejandro Báez Meza, representante legal de Central Park Residences, quien a su vez fue el que tramitó en agosto del año pasado un juicio ante el Tribunal de lo Administrativo del Estado (TAE) para llevar a buen puerto el proyecto, demandando que se haga efectivo el cambio de uso de suelo que permite la vivienda vertical.
Cabe recordar que el terreno fue adquirido por el Ejecutivo para permutarlo con el Poder Judicial Federal, a fin de que éste construyera allí el Palacio de Justicia, lo que no procedió por las características de la zona en materia ecológica y la necesidad de preservarla.
El visto bueno condicionado en materia de impacto ambiental se emitió por un año, “contado a la fecha de emisión”, dice el oficio 1800/2007/1471.Entre las condicionantes destaca que el desarrollador “deberá suministrar y colocar adopasto [un pasto especial ecológico]” en el estacionamiento y colocar malla geotextil sobre la malla ciclónica que divide al predio de la avenida Patria, para evitar dispersión de partículas y polvos a áreas colindantes.
Se le condiciona a su vez a que realice la construcción de un sistema de absorción que recolecte aguas pluviales y las inyecte al acuífero mediante pozos profundos, que realice dos riegos por día, con el objeto de procurar la humectación del suelo, “evitando la emisión de polvos fugitivos en las etapas de preparación del sitio y construcción”, y controlar las emisiones de ruido, entre otras.
Buscarán mantener una moratoria municipal
• El pleno del Ayuntamiento de Zapopan se pronunciará respecto a la petición de Francisco Javier Sánchez Gil, quien se ostentó como representante legal de la Sociedad Anónima de Capital Variable Central Park Residences (no lo acreditó), a efecto de que sea revocado el punto de acuerdo autorizado el pasado 11 de mayo de 2007, mediante el cual se instruyó a la Dirección General de Obras Públicas para que se abstuviera de expedir licencias y cualquier autorización o acto jurídico tendiente a la construcción en el predio Charcos Azules.
El terreno se ubica en avenida Patria sin número, esquina con Manuel Longín, entre ésta y la calle Manuel Ávila Camacho, en el fraccionamiento Atlas Colomos, en Colomos III o El Polvorín.Los integrantes de la Comisión de Desarrollo Urbano del ayuntamiento consideran que se debe declarar improcedente tal solicitud y advierten que el visto bueno en materia de impacto ambiental “no significa que la Dirección General de Obras Públicas esté obligada a otorgar el alineamiento y número oficial del predio en cuestión ni tampoco a expedir la licencia de construcción correspondiente”.
Entre los argumentos que esgrimió Sánchez Gil en su favor destaca el escrito de Martha Ruth del Toro Gaytán, titular de la Secretaría del Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades), en que indica que el terreno está fuera de una zona de protección de recursos naturales y no existe decreto alguno que establezca una regulación distinta a la contemplada en el Plan Parcial de Desarrollo Urbano.
A su vez, adjuntó el dictamen favorable de 3 de octubre de 2007, emitido por la Dirección General de Ecología y Fomento Agropecuario, y los documentos de factibilidad de agua y drenaje, de fecha 11 de septiembre de 2007, emitidos por el SIAPA, según oficio 1418/2007 suscrito por la Gerencia Técnica.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario