Decidirá Semarnat si da los permisos de cambio de uso de suelo para Tambora y Marina Careyes
SERGIO HERNÁNDEZ - MURAL
Talar la selva tropical caducifolia, el ecosistema más amenazado en el continente americano, o permitir que Chamela siga considerada como una de las regiones más importantes para la conservación a nivel mundial, por su riqueza de flora y fauna.
Ese es el valor de la decisión que tomará José de Jesús Álvarez Carrillo, delegado en Jalisco de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) durante la semana que comienza, ante la necesidad de emitir el resolutivo de cambio de uso de suelo para los proyectos turísticos IEL La Huerta (Marina Careyes), y Tambora.
Si bien ambos complejos, a instalarse en la costa del Municipio de La Huerta, ya tienen autorizada la Manifestación de Impacto Ambiental por la misma Semarnat, no pueden iniciar obra sin conseguir el permiso de cambio de uso de suelo, decisión que durante meses ha analizado la dependencia federal.
En el Gobierno de Jalisco está dividida la opinión de permitir estos dos megaproyectos turísticos en Chamela. La Secretaría del Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable no está de acuerdo con la forma en que están planteando el desarrollo urbanístico de la zona.
Pero la Secretaría de Desarrollo Rural emitió ya su voto a favor en nombre de Jalisco, en el seno del Consejo Estatal Forestal, donde también tienen voz y voto la Comisión Nacional Forestal, la Universidad de Guadalajara y productores forestales.
Las opiniones del Consejo Forestal se analizan en la delegación Jalisco de la Semarnat, instancia que tiene la competencia y la facultad para emitir el resolutivo final que implicará, en este caso, talar o no la selva.
Pierde Don Andrés
No es oficial aún pero todo indica que el proyecto turístico Rancho Don Andrés, el cual se pretendía instalar también en la zona de Chamela Cuixmala, será cancelado por no haber podido comprobar que sus instalaciones serán benévolas con el sistema ambiental en el que se pretenden ubicar.
Fraccionamiento Punta Farallón, como se denomina legalmente el grupo de empresarios encabezados por Giorgio Brignone, solicitó a la Secretaría del Medio Ambiente la autorización correspondiente, pero ante la deficiente información entregada a la dependencia federal, esta solicitó información adicional.
El 21 de mayo se dieron 60 días para entregar los nuevos datos, pero Fraccionamiento Punta Farallón no lo hizo por lo que el trámite deberá ser declarado oficialmente como caduco por la Semarnat, de acuerdo con el artículo 22 del Reglamento de Evaluación de Impacto Ambiental.
Este proyecto turístico pretendía instalarse junto al Santuario de tortuga marina denominado Playa Teopa, área que buscaban utilizar para que los clientes realizaran cabalgatas.