miércoles, 15 de julio de 2009

Señalan a Guadalajara por urbanizar barranca

Sergio Hernández Márquez . MURAL

La Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) cuestionó el cambio de uso de suelo hecho por Guadalajara en la orilla de la barranca, donde el Ayuntamiento había creado un Área Natural Protegida en la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, el 5 de junio de 1995.

Los cuestionamientos de la Semades son en base a lo que señala el Ordenamiento Ecológico Territorial del Estado de Jalisco, publicado el 28 de julio del año 2001, donde menciona que, por sus características esa zona de la barranca debe mantenerse en su estado natural, como ya lo decía también el Plan de Ordenamiento de la Zona Conurbada de Guadalajara, de 1982.

"Actuamos en el ámbito de nuestra competencia que es recomendando al Ayuntamiento la aplicación de los criterios que contempla esta Unidad de Gestión Ambiental que es de Protección. Independientemente de que ya se permita el uso urbano tendrán que necesariamente que considerar la fragilidad", señaló la titular de la Semades, Martha Ruth del Toro Gaytán.

Las observaciones de la dependencia estatal fueron recibidas en el Ayuntamiento el 11 de junio, mediante el oficio Semades 0874/2009, donde se señala que la zona a urbanizar, ubicada junto al zoológico, está considerada como Área Natural Protegida en el Ordenamiento Ecológico Territorial.

La titular de Semades acepta que la Constitución General de la República da atribuciones a los Ayuntamientos para que tengan la última palabra respecto a los usos de suelo, pero que buscan orientar al Ayuntamiento sobre las características de la zona para la toma de decisiones.

En el oficio que envía Semades al municipio se recomienda que, si ya se va a urbanizar, al menos se establezca una zona de amortiguamiento, se separen los sistemas de drenaje pluvial y doméstico, y dejar un área de 10 metros cuadrados de áreas verdes por cada persona que se proyecte establecer en la nueva zona habitacional.

Inicia Semades monitoreo móvil

Sergio Hernández Márquez . MURAL

La unidad móvil de monitoreo de calidad del aire se puso ya a funcionar, tomando las primeras muestras en el municipio de Tlajomulco, donde la Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) sospecha que hay elevados índices de contaminación.

El equipo tiene la capacidad para medir ozono (O), partículas menores a 10 micras (PM10), óxidos de nitrógeno (NOX), bióxido de azufre (S2O) y monóxido de carbono (CO).

Sin embargo no contempla la medición de partículas menores a 2.5 micras (PM2.5), contaminante microscópico que genera daños en el sistema respiratorio y cardiovascular, concentraciones que son obligatoriamente medidas en Europa y Estados Unidos, por sus serias afectaciones a la salud.

"No tenemos el recurso para equiparla, aunque sí estaríamos buscando en un futuro próximo tener el medidor de PM2.5 y el analizador cuesta aproximadamente 700 mil pesos", señaló María Elena Zúñiga Alvarado, coordinadora de la Red Automática de Monitoreo Atmosférico de Guadalajara.

La unidad móvil se encuentra instalada en la delegación de Tlajomulco conocida como La Concepción, que está rodeada de nuevas zonas habitacionales, zonas agrícolas, y ladrilleras relativamente cerca, por lo que se pretende hacer un reporte de qué tanto aporta esta parte de la zona conurbada a la elevada contaminación de Miravalle, considerada Zona de Alta Fragilidad Ambiental.

Los primeros resultados de la unidad móvil en Tlajomulco han arrojado hasta 85 imecas de ozono en temporada de lluvias, lo que preocupa a funcionarios de la Semades ya que en época de estiaje, con alta radiación solar, los imeca pueden facilmente rebasar los 100 puntos, generando una calidad del aire mala.

El equipo, que costó 4.5 millones de pesos, se mantendrá en Tlajomulco hasta el 7 de agosto para luego trasladarse a ciudades medias que también se sospecha que tienen problemas de contaminación del aire como Zapotlán El Grande, Ocotlán y Lagos de Moreno.

La titular de la Semades, Martha Ruth del Toro, fue quien hizo la inauguración simbólica de los trabajos de la estación de monitoreo, argumentando que Tlajomulco requiere una medición de la calidad del aire al presentar una población de 220 mil personas, 55 mil 800 vehículos y al menos 130 empresas que deben ser verificadas por la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente.

La unidad móvil cuenta además con equipo para que funcione como estación meteorológica, registrando la dirección y velocidad del viento, radiación solar, humedad relativa, temperatura y presión barométrica y pluviómetro.

Además de este equipo, la dependencia estatal tendrá en agosto cuatro unidades móviles más, aunque estas menos sofisticadas, y se utilizarán para determinar qué unidades vehiculares están contaminando.

"De hoy al final de año estaremos trabajando en forma muy intensa para que no haya un solo ciudadano que teniendo un vehículo no cumpla con su obligación fundamental que es afinar y verificar", mencionó la titular de Semades.

Semarnat espera los estudios de impacto ambiental para la construcción de estadio

La dependencia evaluará la propuesta de urbanizar la Barranca de Huentitán

La alcaldía tapatía está en su derecho de modificar el uso de suelo: Del Toro Gaytán

LA JORNADA JALISCO

La construcción de un estadio de atletismo en la ceja de la Barranca de Huentitán, para albergar esta disciplina en los Juegos Panamericanos 2011, estará condicionada a la presentación de estudios de impacto ambiental, dijo el subdelegado de Gestión Ambiental de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en Jalisco, Isidro de Jesús Lucio Virrueta.

El funcionario comentó que el Ayuntamiento de Guadalajara tiene competencia para modificar los usos de suelo como el de la Barranca de Huentitán que está considerado como Área Natural Protegida, sin embargo, el visto bueno para la construcción del inmueble además de vivienda vertical lo hará la dependencia.

Virrueta adelantó que en caso de que los estudios comprueben que habrá daños ecológicos, el promotor del proyecto estará obligado a aportar una cantidad económica al Fondo Forestal Mexicano para que se realicen obras de protección y conservación en el sitio que será afectado.