sábado, 29 de noviembre de 2008

La muerte visitó la selva

Agustín del Castillo - PÚBLICO

Nadie sabe exactamente cuándo murió la criatura. El primer signo fue el cambio de comportamiento de la Pecas, que de mostrarse agresiva, se revolcaba y jugueteaba coqueta frente a los extraños, en clara señal de su regreso al celo, posible sólo en ausencia de crías. Días después empezó a llegar un olor fétido desde la arboleda, y no tardaron los zopilotes en exhibir su lúgubre planeo por encima de las tescalamas. Entonces, los hombres se animaron a entrar.

Al interior del predio enmallado de 1.1 hectáreas, en los días finales del pasado octubre, el investigador Rodrigo Núñez encontró el cadáver.

El cráneo del cachorro lucía destrozado por una mordedura de la propia madre, que probablemente se comió el cerebro. Pero no se descarta que el perecimiento lo hubiera provocado el veneno de algún reptil común en la selva mediana —víbora de cascabel o monstruo de gila, por ejemplo—, y luego, la pantera se comiera los restos, una forma de canibalismo bastante extendida en muchos felinos, señala Gonzalo Millán Curiel Alcaraz, director de unidad de manejo forestal de El Tuito, y principal asesor de los comuneros de Bioto en el proceso de rescate del jaguar en esta región de la Costa Norte de Jalisco.

“Porque el vientre de la Pecas se veía inflado, como si hubiera ingerido ponzoña del cuerpo de su tigrito”, agrega en defensa de la reputación de la fiera (en náhuatl, tecuani) más famosa de esta región del país.

Lo único cierto es que hace casi cinco semanas se perdió el primer fruto de la relación entre la Pecas y Heracles, las estrellas de la unidad de manejo de vida silvestre que la comunidad indígena de Santa Cruz del Tuito abrió, en principio, para preservar a la hembra de Panthera onca que una tarde de junio de 2003, a menos de un mes de nacida, rescató don Gilberto Rodríguez en las cuevas del Castillo de los Jilotes, tras la muerte de su madre a manos de cazadores furtivos (Público, 24 de agosto de 2003 y 2 de diciembre de 2007).

Más de cinco años de trabajo no pueden venirse abajo por este infortunado incidente, advierte Curiel Alcaraz. En todo caso, se ha aprendido de las costumbres de estas criaturas tan mal conocidas, y en unos días más, los “tigres” serán nuevamente reunidos en busca de una segunda reproducción, y de una historia más feliz.

La historia. El 1 de abril de 2008 nacieron dos cachorros de la Pecas. “Al primero lo acicaló y preparó bien, con todos sus instintos maternos, y tal vez por la misma inexperiencia, por ser primeriza, lo apachurró [...] al segundo cachorro le fue mejor. En consultas con expertos, nos recomendaron que no lo separáramos de la madre, que lo dejáramos a ver qué pasaba, toda vez que las condiciones del sitio eran favorables, había ecosistemas con buena salud, cuevas en donde se podían refugiar, agua, y les estuvimos suministrando alimentos; hasta el quinto mes todo iba funcionando muy bien…”.

—¿Qué sucedió?

—[…] encontramos el cadáver y Rodrigo vio a la Pecas inflada del vientre como si fuera a parir otra vez; yo pensé en muerte por envenenamiento, provocada por alguna víbora de cascabel con que se haya puesto a jugar el cachorro; no es raro, empiezan a jugar y al final es de mordedura lenta pero muy efectiva.

—¿Se lo comió y le hizo efecto el veneno?

—Puede ser, porque la parte que le quitó al cachorro fue la cabeza, que la destrozó, devoró el cerebro y una parte de la espaldilla.

El suceso no arredra a los gestores del proyecto. Heracles goza de buena salud, y la Pecas tiene varios años más para reproducirse. La clave será separar pronto a las crías o bien confinar al macho de inmediato, apunta Curiel. Porque por allí se cuela la más probable, y a ojos humanos, siniestra, de las eventuales causas del fallecimiento, sin olvidar que la naturaleza no participa de esos dilemas morales.

—¿Y si fuera la Pecas la autora directa de la muerte?

—Ni modo: es lo más cercano a las evidencias; podría haber sido por la falta de alimento, pero lo descartamos porque cada tercer día les dábamos de comer; el otro motivo del sacrificio pudo ser la presencia de Heracles, que sólo estaba separado en un enrejado contiguo; las feromonas y las hormonas no las percibimos nosotros pero las hembras sí, y más si el cachorro era hembra —lo cual nunca pudimos saber—. O sea, que la hubiera visto como competencia, o simplemente que el efecto de las hormonas haya sido tan fuerte que obligara a sacrificar al cachorro para poder entrar en celo nuevamente.

—¿Y así sucedió?

—Inmediatamente. En pocos días la Pecas entró en celo.

La Primavera tiene 12 nuevos huéspedes

Sergio Blanco - PÚBLICO

Lentos y temerosos, serpientes, aguilillas y mapaches, doce en total, se integraron a su nuevo hábitat en el bosque La Primavera. Ayer, personal del Centro de Conservación e Investigación de Vida Silvestre (CIVS), de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), se encargó de liberar a estos ejemplares —que habían vivido en cautiverio— en su nuevo hogar.

EL CIVS es la dependencia encargada de recolectar las especies que son producto de decomisos, entregas voluntarias de ciudadanos que los poseían o de rescates; el propósito principal es liberarlos y reintegrarlos a sus ecosistemas originales. La entrega de los doce animales que se realizó ayer en La Primavera —cuatro mapaches, tres víboras alicantes, una víbora chirrionera, una víbora tilcuate y tres aguilillas cola roja— fue el resultado de entregas voluntarias, lo que eximió de sanción a sus ex propietarios.

Karina Aguilar Vizcaíno, integrante del área de Educación Ambiental del CIVS, habló de la dificultad de integrar a este tipo de especies de regreso al bosque, ante las limitaciones de supervivencia que han desarrollado, producto del fenómeno de la domesticación humana.

Puso como ejemplo el caso de los felinos, que tardan años en poder adaptarse de nuevo, debido a que cuando están en cautiverio muchas veces se les mima —comen pollo cocido, por ejemplo—, lo que modifica su dieta y les provoca dificultades para digerir carne cruda de regreso en su hábitat natural, donde deben cazar a sus presas vivas.

De acuerdo con Aguilar Vizcaíno, éste es el motivo por el que no todos los animales son candidatos a regresar al bosque; por esta razón, Karina exhortó a la población a no llevar nunca mascotas al bosque, ni por diversión ni para liberarlos. Gatos y perros, dijo, son de las especies que, al cazar por diversión, dañan más a los ecosistemas como el bosque La Primavera: “Cuando hay sitios de conservación [natural], cuando se quiere dejar el lugar como era antes, pues hay que sacar todo esto”, expresó, en referencia a la fauna no nativa que muchas personas suelen liberar ahí.

Dijo que durante la rehabilitación a la que este tipo de animales son sometidos en el CIVS, el animal debe evitar todo contacto con el ser humano; con esto, el ejemplar reconstruye el miedo natural hacia el hombre y así, por instinto, vuelve a alejarse con sólo ver al “predador más peligroso”.

Por su parte, Carlos Sánchez, representante de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), indicó que el trabajo del CIVS es rehabilitar conductual y físicamente a los animales para su reubicación en el medio ambiente o para instalarlos cuando no reúnen las condiciones de reintegración.

Sin embargo, aun liberados, sólo 60 o 70 por ciento sobrevive, debido a que “los animales de dos patas con escopetas no pueden controlarse”, lamentó Ernesto Ramo Montaño, encargado del área de Salud Ambiental del Centro de Conservación e Investigación de Vida Silvestre.

Si usted posee un animal que desea liberar, contacte al personal del CIVS, al teléfono 3609-6356.

En La Primavera, reservas sobre la geotermia

Sergio Blanco - PÚBLICO

Mientras La Primavera siga en posesión de ejidatarios y demás particulares, será difícil impedir que se lleven a cabo proyectos como la planta geotérmica que se pretende instalar ahí, señaló José Luis Gámez, director del bosque: “Ojalá que la ciudadanía tenga los recursos para que compremos el bosque, para que tengamos la certeza legal para impedir la explotación”, con lo que se suma al grupo de opositores del proyecto: “Desde el punto de vista social, yo estoy en contra”.

La postura tanto de él como del grupo de guardabosques acerca de la planta es la misma, pues la función de ellos es la de “preservar la fauna y los árboles”, y la función del bosque es “generar servicios ambientales y no electricidad”, punto en el que concuerda con el investigador de la Universidad de Guadalajara Arturo Curiel Ballesteros, quien criticó el proyecto desde su fracaso en los años ochenta: “Ningún tipo de proyecto temporal es superior a un beneficio permanente que pueden brindar los ecosistemas” (Público, 27 de noviembre).

Martín de la Rosa Limón, director de inspección y vigilancia del bosque La Primavera, se deslinda del regreso de la geotermia: “Fue una decisión de las autoridades de otro nivel. No queda más que esperar que nos ordenen lo contrario”, es decir, que den marcha atrás al proyecto, pero, como empleado, él cree que está para “apoyar las decisiones de la autoridad”.

La jerarquía de los guardabosques limita sus acciones, por lo que deben subordinar la labor que desempeñan (preservar el medio ambiente) a las decisiones de las dependencias que han dado el aval a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para la construcción de la planta, en este caso, la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable (Semades), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y el Consejo Nacional del Ambiente (Conam).

La oferta de la CFE que convenció a esas dependencias defensoras del medio ambiente es que se compensará el daño con el remozamiento del camino de acceso, con un museo y con reforestación, según lo expuesto por la titular de la Semades, Martha Ruth del Toro (Público, 26 de noviembre).

Para José Luis Gámez, tales beneficios constituyen sobre todo medidas de mitigación del daño que la CFE causó al bosque en la década de los ochenta, cuando comenzó sus acciones de exploración. Aquí también convino con Curiel, que equiparó a la reforestación con maquillaje si no se hace de la manera adecuada, ya que primero se deben generar las condiciones que garanticen la supervivencia de los árboles.

Aun con todo lo anterior y en vista de que la Conam dio su aval, Gámez declaró que tiene confianza y que está de acuerdo con el proyecto si se desarrolla como se lo han presentado, pero que, si se ocasiona un daño similar al de los ochenta, “absolutamente no”, y lo mismo opinó Martín de la Rosa: “Si utilizan las mismas líneas [de electricidad], pues a toda madre, porque, ya ves, mis amigos de la comisión qué respetuosos son”. La CFE tampoco ha indicado si hará otro camino para más torres eléctricas.

Mientras tanto, Gámez se encargará de garantizar la promesa de la CFE de que en 2009 no habrá nuevas exploraciones ni “más desmanes, ni cambio de uso de suelo del que ya hay”, y anticipó que “va a haber marcaje personal”. Y su propuesta sigue en pie, en el sentido de que está en los habitantes elegir el beneficio que traerá la geotérmica para el bosque: “No, no, para el bosque no, para la ciudadanía”, corrigió Martín de la Rosa.

Congreso pide explicaciones Con el voto en contra de la fracción del Partido Acción Nacional (PAN), la Comisión de Asuntos Metropolitanos del Congreso del Estado acordó ayer invitar a la secretaria del Medio Ambiente, Martha Ruth del Toro, y al delegado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), José de Jesús Álvarez Carrillo, para que expliquen por qué se dio luz verde al proyecto de geotermia en el bosque La Primavera.

El diputado Enrique Alfaro Ramírez, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), dijo ayer en entrevista que en el caso de los permisos para que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) instale una planta, parece que las autoridades no tienen memoria sobre los daños que se causaron hace alrededor de 20 años. En entrevista, dijo que la intención de citar a los funcionarios es “conocer cuál es la visión que tienen en cuanto a la política ambiental, porque no se puede seguir dando bandazos sin una articulación de una política pública seria”.

Pedirán a Semades y Semarnat explicar proyecto en La Primavera

Mauricio Ferrer - LA JORNADA JALISCO

La Comisión de Asuntos Metropolitanos del Congreso del Estado pedirá audiencia la próxima semana a la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable (Semades), Martha Ruth del Toro Gaytán, y al delegado en Jalisco de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), José de Jesús Alvarez Carrillo, a fin de que expliquen las implicaciones del proyecto de geotermia en el Bosque de La Primavera.

“El asunto es que La Primavera es el pulmón de la Zona Metropolitana de Guadalajara, entonces, echar a andar este proyecto sin dar a conocer las implicaciones que traería sería una irresponsabilidad”, expresó el presidente de la Comisión de Asuntos Metropolitanos, el diputado perredista Enrique Alfaro Ramírez.

En la sesión, Alfaro Ramírez explicó que el hecho de solicitar la presencia de los funcionarios obedece a la urgencia de conocer cuál sería la implicación del proyecto que pretende producir energía en La Primavera.

El perredista comentó que le externó ya al rector general de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Marco Antonio Cortés Guardado, la posibilidad de que la casa de estudios comisione a algunos investigadores conocedores del tema para que también estén presentes en la reunión que probablemente pueda ser después del miércoles de la semana próxima cuando ya se haya debatido y aprobado el Presupuesto de Egresos de 2009 en el Congreso local.

En tanto, el diputado priísta Abel Salgado Peña propuso que se incluya analizar la pretensión del Ayuntamiento de Zapopan de cambiar el uso de suelo de 590 hectáreas aledañas al mismo bosque. Según Salgado, el cambio responde a la intención de urbanizar estos terrenos y para la construcción de viviendas en los mismos.

Dijo que tales hectáreas se consideran como área verde dentro del Plan Parcial de Desarrollo del municipio y pidió así conocer los criterios de las autoridades al respecto.

Ante tales argumentos, Alfaro Ramírez también planteó un diálogo con el presidente municipal de Zapopan, el panista Juan Sánchez Aldana, para conocer sobre este tema y sobre otro: el conflicto vial que circunda la denominada Plaza Andares, sobre las avenidas Patria y Acueducto en el poniente de la ciudad.

Alfaro Ramírez dijo que esta zona, perteneciente al bosque Los Colomos, es una cuenca hidrológica por lo que, aunado a los conflictos viales, puede presentarse en cualquier momento inundaciones en épocas de lluvias.

“Esta es una zona de recarga muy importante que, al estar cubierta por concreto, el agua de lluvia, que se iba al subsuelo puede generar ahora inundaciones”, detalló.

“El problema es multidimensional y por qué la autoridad no ha hecho nada y defiende a particulares, ¿qué hay detrás?”, cuestionó.

Según Alfaro, el Partido Acción Nacional (PAN) no quiere entrarle al debate en estos temas.

“Nosotros no queremos linchar a nadie, solamente conocer qué es lo que tienen que decir las autoridades al respecto”, concluyó.