domingo, 13 de julio de 2008
Pierden oxígeno
La UdeG revive el proyecto de protección del bosque de arce
Agustín del Castillo - PÚBLICO
Por lo pronto, la institución pretende establecer allí un laboratorio similar al que funcionó en La Primavera o al que opera en Las Joyas, en sierra de Manantlán.
Para ello, la universidad cuenta con el ofrecimiento de la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur) de cederle las 150 hectáreas que compró la dependencia, a precio de oro (60 mil pesos la hectárea, contra un valor de mercado de 15 mil pesos, según lo reveló Público el 28 de enero de 2007), como medida de “mitigación” por los graves daños provocados por la carretera ilegal abierta en la zona a partir de 2004 por el gobierno de Jalisco; en ese terreno, que formará parte de la zona núcleo de la demarcación, comenzarán las labores de protección e investigación sistemáticas.
Briseño Torres advirtió que será de “la máxima prioridad” la constitución como reserva de la biosfera de la comunidad clasificada por los científicos como “bosque mesófilo de montaña”, que incluiría otras asociaciones vegetales de la Sierra Madre del Sur, como son bosques de pino, de encino y de oyamel, así como bosque tropical caducifolio y subcaducifolio.
Tan sólo en la zona de El Cuervo sobreviven decenas de especies en peligro de extinción, entre ellas, la comunidad de arce o maple de azúcar (Acer skutchii) más importante del occidente mexicano, un verdadero superviviente de las últimas glaciaciones, pues se trata de una especie propia de los ambientes neárticos, enclavada en el corazón del mundo neotropical.
El bosque mesófilo de montaña es uno de los grandes amenazados con el cambio climático, por ser un ecosistema de transición biogeográfica que puede ser borrado si se elevan las temperaturas promedio. Alberga más variedad de especies que la selva húmeda. Cubre sólo 0.87 por ciento del territorio nacional, con 10 por ciento de la flora de México (unas tres mil especies) y hongos, lo que subraya tanto su extraordinaria importancia como su alta fragilidad.
La tentativa de protección de la zona tiene su historia. Fue respaldada desde el año 2002 por la mitad de la población adulta de este municipio, que firmó la petición patrocinada desde la Administración municipal, en especial, por el entonces regidor de ecología, Toribio Quintero Moro, promotor de la restauración de microcuencas, quien incluso tiene un hongo endémico de la región, Blumenabia toribio talpensis, en homenaje a su lucha por la naturaleza (Público, 17 de agosto de 2002).
Sin embargo, el planteamiento fue desdeñado por el gobernador Francisco Ramírez Acuña, quien tuvo las peores relaciones con el sector ambiental tanto ciudadano como gubernamental, y bloqueó todas las iniciativas bajo la idea que eran obstáculos al desarrollo del estado.
El rector de la UdeG acudió ayer a la tupida floresta, ubicada a tres kilómetros del entronque con la inclusa carretera Talpa-Llano Grande, acompañado por el presidente municipal de Talpa, Gildardo Sánchez González; el diputado local, Jorge Alberto Villanueva; el propio Toribio Quintero Moro y diversos científicos universitarios.
Dijo que buscará que este bosque sea protegido “para beneficio de la humanidad […] la pretensión es, como lo hemos hecho en la sierra de Manantlán, con el laboratorio científico Las Joyas, crear un laboratorio natural en un esquema acordado con el gobierno de Jalisco. Debemos proteger la gran información que está aquí disponible para nuestros científicos, y que no podemos despreciar. Es más lo que desconocemos que lo que conocemos de este bosque. Por eso quise venir a este sitio, para entre todos detonar una gran conciencia que sirva para protegerlo”.
Agregó: “tenemos estas áreas para conservarlas y estudiarlas, pero también que puedan servir de educación ambiental para que vengan los niños, los jóvenes […] este es un magnífico laboratorio viviente que debemos cuidar y conservar. Así que vamos a hacer las gestiones necesarias desde el Congreso del estado, el gobierno de Jalisco y la universidad, para presentarnos ante las autoridades federales, y podamos declararlo como área natural protegida, en una reserva de la biosfera”.
También acudió al sitio el investigador del Departamento de Ecología y Sistemática Vegetal, del CUCBA, José Antonio Vázquez García, uno de los descubridores de la comunidad biótica.
El científico explicó que los bosques de niebla demandan una elevada humedad atmosférica gran parte del año y la mezcla de elementos florísticos y faunísticos de ambos hemisferios del continente americano “contribuyen a su elevada diversidad”.
Entre las características de este tipo de vegetación destacan la diversidad alta de epífitas (plantas que viven sobre grandes árboles) y helechos. Las orquídeas son numerosas. Abundan árboles de géneros como el Carpinus (mora blanca), Ostrya (mora roja), Alnus (aile), Magnolia (magnolia), Quercus (encino), Juglans (nogal), Tilia (cirimbo), Cornus (azulillo) y Acer skutchii rehder, éste último, subespecie del arce azucarero (Acer saccharum) típico de la América boreal, añadió.
“La zona núcleo que buscamos proteger comprende una extensión de 6, 759 hectáreas, con una zona de amortiguamiento de 49 mil hectáreas. Es importante que también sea protegida esta zona, ya que de talarse esa área cambiaría las condiciones de microclima requeridos para conservar la biodiversidad del bosque. La Sedeur, como compensación ambiental por la construcción de la carretera, está dispuesta a cedernos por lo pronto 150 hectáreas. Si apresuramos el paso, a fin de año podríamos tener la declaratoria lista, solo para ser presentada ante las instancias federales”, puntualizó el académico.
El problema, como en todas las áreas naturales valiosas del país: la propiedad pública es mínima y no se ha sabido insertar a los dueños en un proceso de manejo adecuado y compensación que los haga aliados de la protección institucional.
No obstante, el alcalde de Talpa, Gildardo Sánchez, destacó que se ha impedido la tala con relativo éxito. Sin duda ayuda el apoyo de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), que este año aporta en subsidios para conservación y manejo sustentable cerca de quince millones de pesos.
Además, “hemos avanzado mucho. Llevamos doce años trabajando con ellos y haciéndoles ver la importancia de este bosque. Para que sea declarado zona protegida es importante su participación, porque tienen el derecho ancestral de la zona. Por fortuna han entendido el mensaje y están dispuestos a colaborar”, aseguró.
La verdad, ese supuesto acuerdo siempre ha sido precario. En 2003 se frenó por medio de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) un aprovechamiento forestal agresivo en las inmediaciones de la umbría. Entre 2004 y 2006, la maquinaria del gobierno derribó varias hectáreas boscosas de la prolongación de esta cañada hacia el poniente, para dar paso a la carretera a Llano Grande, que no contaba con permisos ambientales.
Y no se puede dejar de lado el problema de la cacería clandestina que afecta a especies tan notables como el jaguar, que utiliza estas montañas como corredor y coto de caza, lo que lo ha enfrentado al hombre en la creciente y desordenada colonización de los últimos 40 años.
El área protegida es la apuesta por cambiar la tendencia, hasta hoy irresistible, de destrucción.
Una protección fallida a seis años
Está a punto de cumplir seis años la propuesta de protección de los bosques de la Sierra Madre del Sur en Talpa, con su zona núcleo en la cañada del Cuervo, donde sobrevive la comunidad de arce o maple más nutrida del subtrópico mexicano, residuo de las últimas grandes glaciaciones
El gobierno de Jalisco, omiso en su responsabilidad de proteger la zona, abrió en 2003 el trazo de la carretera Talpa-Llano Grande y dañó los bosques mesófilos de montaña vecinos del arce, sin contar con permisos ambientales. Esto significó una multa de 4.5 millones de pesos por parte de la Profepa, la cual fue recurrida. En 2005, el organismo federal le exigió comprar el predio como compensación a los daños ocasionados
Pero la compra de los predios no es una idea nueva; en 2004 la planteó el secretario de Medio Ambiente, y en 2005, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas anunció que habría recursos para lograrlo. Por otro lado, las gestiones para la reserva de la biosfera con zona núcleo en estas cañadas donde nace el río Talpa no han avanzado casi nada
Con el pago de nueve millones de pesos, la Sedeur adquirió 150 hectáreas del predio Ojo de Agua del Cuervo a finales del año 2006; la meta inicial era comprar mil hectáreas para garantizar mejor la conservación de la zona; el costo pagado por hectárea, de 60 mil pesos, resulta excesivo: en la zona, una hectárea de bosque se paga a diez mil pesos
21 por ciento de sus especies están amenazadas o en peligro de extinción en el caso de la flora, y hay animales en riesgo. El valor de las florestas se incrementa por su producción de agua: abastecen de manera permanente a los poblados del municipio de Talpa diseminados entre los contrafuertes de la sierra, incluida la cabecera municipal.
Fantasma judicial contra las Áreas Protegidas
Enrique Jardel
El consejero nacional, experto forestal de la UdeG, destaca que la derrota en La Primavera "sienta un precedente legal que amenaza la integridad de otras áreas protegidas del país".
Además de ser un área protegida federal en coadminsitración con Jalisco, es reserva internacional de la biosfera del el programa MAB-Unesco [El hombre y la Biosfera].
"La resolución equipara el decreto del área protegida con una expropiación, y esto mismo puede ser un argumento utilizable en 85 por ciento de la superficie de parques y reservas de todo México, pues sólo 15 por ciento de su superficie corresponde a terrenos nacionales, según datos de la propia Conanp". Es decir, "podrían generarse un serie de amparos contra los decretos".
Por si fuera poco, la superficie sustraída a La Primavera "corre el riesgo de ser invadida por desarrollos inmobiliarios y proyectos supuestamente ecoturísticos, que agravarán la situación […] que un área protegida de designación internacional pueda ser mutilada de esta manera, es algo que merece una respuesta contundente de la Conanp, del CNAP [Consejo Nacional de Áreas Naturales Protegidas], del Comité MAB de México y de la comunidad conservacionista de este país".
Indicó que en el modelo mexicano de conservación, "las áreas protegidas se imponen a través de decretos sobre terrenos de propiedad comunal, ejidal o particular, estableciendo en función del interés público reglas de uso de la tierra y recursos naturales. Aunque formalmente no modifican la tenencia de la tierra, sí imponen una limitación de dominio, lo que obliga a la compensación; por ejemplo, pago por servicios ambientales basado no en la privatización, sino el reconocimiento de los derechos de propiedad y de los beneficios públicos que derivan de la conservación; apoyo para el desarrollo de proyectos sustentables en zonas de amortiguamiento, y apoyo para cubrir los costos de conservación".
En el caso de áreas protegidas contiguas a zonas urbanas, como La Primavera, "donde existen presiones de especulación inmobiliaria, se debe pensar en una estrategia […] que puede incluir la compra de tierras que queden bajo propiedad de la Nación […] para asegurar a largo plazo la preservación del interés público", añade.
Recuerda que las reservas de la biosfera concebidas en el programa MAB de la Unesco, "fueron diseñadas como una estrategia de conservación integrada con la búsqueda de alternativas de gestión del territorio y los recursos naturales para mejorar la calidad y condiciones de vida de la gente. El manejo […] se basa en una zonificación que incluye zonas núcleo dedicadas a la protección estricta y áreas críticas desde el punto de vista ambiental [cabeceras de cuencas, hábitats amenazados o únicos, sitios con alta biodiversidad], zonas de amortiguamiento dedicadas a distintas formas de aprovechamiento compatibles con la conservación, que rodean a las zonas núcleo y contribuyen a su protección, y zonas de transición o cooperación, alrededor de las reservas, que comprenden su región de influencia…".
En La Primavera "debería de desarrollarse una estrategia de trabajo en la zona de transición o cooperación, que implica incidir en la gestión ambiental y en el ordenamiento territorial de la zona metropolitana de Guadalajara […] debe de considerar el desarrollo urbano en su zona de transición como el tema central y prioritario, frente al cual la gestión centrada en lo forestal pasa al segundo plano".
A juicio de Jardel Peláez, "resulta desalentador leer las declaraciones hechas por funcionarios de la Conanp y la Semarnat en respuesta a la resolución del tribunal. Muestran por un lado un espíritu derrotista y por otro cierta negligencia. No pueden decir que lamentan haber perdido [como dice Enkerlin –presidente de la Conanp-], sino que deberían de plantear cómo van a enfrentar la situación para defender la integridad del área protegida. No puede confiar la ciudadanía en monitoreos satelitales ni en que no se va a permitir cambio de uso del suelo, cuando no se ha mostrado capacidad para atender un juicio de amparo".
Lo que muestra el caso de La Primavera "es la fragilidad de las áreas protegidas, la falta de una estrategia de conservación coherente, la debilidad de las instituciones y el predominio de los intereses privados y el afán de lucro sobre los intereses públicos. Seguramente los jueces no se han percatado del predicamento ambiental que enfrenta la humanidad, y la sociedad jalisciense en un estado con una situación ambiental crítica, ni tampoco parecen estar concientes de la importancia de La Primavera para los cuatro millones de habitantes de la zona metropolitana de Guadalajara".
Es decir, "la decisión que tomaron podrá ser legal, pero es injusta y, desde un punto de vista ambiental, irracional".
Raquel Gutiérrez Nájera
Para la directora del Idea, "el hecho de que se haya otorgado el amparo a los ejidatarios porque no se garantizó el derecho de audiencia, deja ante dos escenarios en que la Conanp puede incidir".
Uno, "con el expediente del área natural protegtida ANP que ya se tiene incorporar las 552 hectáreas para ampliar la declaratoria y poner a consulta de los ejidatarios estas 552 hectáreas, y posteriormente declararlas parte de la Primavera motivando y fundando la utilidad pública".
Dos, "se tiene que trabajar con la federación, estados y municipios para que no se otorgue ningún cambio de uso del suelo mientras se lleva a cabo el proceso jurídico, pues finalmente, aún sin decreto, no podrían autorizar cambios de uso del suelo ya que las leyes ambientales prevén disposiciones para el aprovechamiento de bosques y cambios de uso del suelo, máxime en los casos en que estos actos puedan afectar un área natural protegida"..
Es decir, "jurídicamente el caso tiene muchas posibilidades para garantizar la preservación del bosque; el caso es que nuestras autoridades actúen en consecuencia".
Considera que "no es posible seguir perdiendo casos por la ausencia de defensa legal efectiva. Esto debe traer a colación la propuesta de un Ombudsman Ambiental para el estado de Jalisco, que el Idea ha venido proponiendo desde el 2006".
Arturo Curiel Ballesteros
El también investigador del CUCBA teme el efecto dominó: más amparos contra el bosque protegido.
Lo que está pasando es que "el que ése interés público que se asocia al bienestar de cientos de miles de gentes que habitamos este territorio y los millones que vendrán en las siguientes generaciones, se subordine al interés de un puñado de gentes cuyo interés es inmediatista".
Si la tentativa prospera, lleva a "legitimar que el interés utilitario y particular de un grupo de personas, es mayor al interés público nacional de ésta y de futuras generaciones […] sería legitimar un acto que no puedo llamar de otra forma, que de corrupción, pues no es posible que derive de un procedimiento administrativo truculento -tengo entendido que inició con la solicitud de que se comprobara que La Primavera cumplía con servicios ecosistémicos de interés público cuando ésta se declaró- […] esos argumentos truculentos servirán para quitar la protección al resto de las 30,500 hectáreas, reduciendo la protección a las poco más de cinco mil ha que tiene el gobierno del estado, terminado el último eslabón de vida silvestre del corredor americano en la zona centro del estado".
Así, se da el absurdo de que la protección queda sujeta a "la buena voluntad de los propietarios".
En realidad, añade, "no es la primera acción truculenta que le pasa a La Primavera", pues está el antecedente del Ayuntamiento de El Arenal, que como no estaba mencionado en el decreto, autorizó el fraccionamiento ilegal de El Roble. Leguleyadas de abogados.
Ante esos escenarios de riesgo, "me parece que es la expropiación es lo único que queda como acción efectiva, expropiación que en el mismo decreto de protección se establece como opción cuando los propietarios del polígono decretado no realicen actos de conservación. Eso se esperaría de un gobierno interesado en la conservación. Lo otro no lo creo viable, como que el ayuntamiento al no dar permiso no se va a construir, que el administrador va a ser vigilante, que se va a iniciar un proceso nuevo de protección".
Es muy claro en el artículo 27 constitucional, "que el interés público está por arriba del particular". Lo que debe evolucionar "a mi juicio, es cómo detener y revertir la corrupción que permite acciones como las que estamos viviendo".
Exigen que "responsables" paguen por daños en casas
Evelyn Águila - EL INFORMADOR
Lo único que pudo recuperar Martha Pacheco fue una cama. El resto de los muebles se echó a perder por el agua que inundó su casa, y la dejó llena de humedad y fetidez. Mientras lava la ropa enlodada, exige que alguien se haga responsable por los daños que sufrió su vivienda y todo lo que perdió tras las inundaciones registradas desde el pasado lunes en la comunidad.
“Aquí todo mundo se lava las manos. La constructora dice que las casas están bien hechas y yo no lo dudo, pero nos engañó al no decirnos que nos veníamos a vivir a un lugar de riesgo. Al Gobierno tampoco le importa, pero alguien se tiene que hacer responsable y devolvernos lo que perdimos.
“Sólo logré salvar mi cama porque es de tubo, de fierro; todo lo demás lo perdí, y ahora tengo que dormir junto con mis tres hijos en un albergue”.
Las calles están llenas de lodo, y el agua aún brota de algunas alcantarillas. Otro problema es que las infecciones estomacales y los dolores de cabeza comenzaron a presentarse.
La desesperación no cesa. A casi una semana de las inundaciones, los colonos acarrean muebles de un lado para otro. Lavan lo que se puede y lo tienden en puertas y ventanas al tiempo que retiran el agua de sus casas. Al fondo del Fraccionamiento La Azucena, las pequeñas viviendas lucen vacías, sólo se escucha el ruido de las máquinas que a marchas forzadas bombean el agua acumulada.
El enojo es general entre los vecinos. Carmen Juárez García no niega su indignación; por el contrario, denuncia que la inmobiliaria no “midió el riesgo en el que nos puso al vendernos estas casas, mucho menos el Gobierno, que los dejó construir en este lugar a pesar de que sabían que con las lluvias nos íbamos a inundar. Es una inconsciencia, una irresponsabilidad”.
Tras cuatro días sin poder dormir bajo su techo, asegura que hoy tendrá que hacerlo, aunque sea en el suelo.
“Nos vamos a regresar, estamos tratando de acomodarnos como sea, donde se pueda”.
Al igual que Martha Pacheco, Carmen Juárez y otros colonos compraron su casa hace menos de seis meses; pagaron cerca de 200 mil pesos.
Temen cadena de enfermedades
A la entrada del complejo habitacional La Azucena, la escena es un día habitual: cortan el pasto y las casas están a la venta.
Basta caminar o recorrer en coche menos de un kilómetro para darse cuenta que en las “entrañas” del fraccionamiento la situación es terrible: lodo por todas partes y aguas negras pestilentes donde ya se forjan gusanos.
María Isabel Amante no teme continuar en su casa, pero sí a las enfermedades y malestares que siente por causa de las condiciones que rodean al fraccionamiento.
“Me da miedo la peste. El agua ya bajó, pero el olor es insoportable y comenzamos a sentirnos mal. Nos duele el estómago y la cabeza; no dudo que después sigan las diarreas”.
La única opción de los lugareños fue unirse. Desde temprana hora tomaron mangueras y comenzaron a lavar paredes, techos y pisos de sus casas para lograr incorporar los enseres que pudieron rescatar, pues será hasta el lunes cuando personal del Municipio de El Salto acuda a las viviendas para efectuar una limpieza con pipas de agua a presión.
Hombres, mujeres y niños, tomaron palas y escobas para quitar el lodazal de las calles; no cuentan con el servicio de luz eléctrica.
Por las afectaciones en viviendas, dos familias presentaron quejas ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, confirma su presidente, Felipe de Jesús Álvarez Cibrián.
Hacinamiento e inundaciones por errores de cálculo, la amarga realidad en La Azucena
La inundación en El Salto, responsabilidad de los gobiernos estatal y municipal: Moreno
Bertha Alicia Moreno, ex alcaldesa de El Salto Foto: ARTURO CAMPOS CEDILLO
Raúl Torres - LA JORNADA JALISCO
Después de haber sido señalada de modificar usos de suelo para permitir la construcción de los fraccionamientos que se inundaron en El Salto, la ex alcaldesa Bertha Alicia Moreno Alvarez señala que la responsabilidad es del gobierno del estado por entubar el canal de El Ahogado y del gobierno municipal por no realizar trabajo de desazolve y mantenimiento en los cauces de los arroyos.
Después de asegurar que durante su administración no se hicieron los cambios de uso de suelo de los fraccionamientos afectados, recordó que pocos meses después de asumir la presidencia del El Salto, en septiembre de 2004, el municipio sufrió inundaciones, por lo que nombró a Luis Alvarez como encargado municipal del agua, persona que conoce a la perfección la zona de El Ahogado y empezaron los trabajos continuos de mantenimiento de los canales, arroyos y los bordos de la cuenca.
“Los dos siguientes años de mi administración no hubo inundaciones y el trabajo que hicimos incluso le sirvió un año al actual presidente”, dijo.
Insistió en que el entubamiento del canal fue un error y con ello se mostró la inexperiencia del gobierno del estado, pues sólo calcularon que llevaría las descargas residuales, pero nunca contemplaron que el agua pluvial también debía correr por ahí.
La ex edil señaló que tiene conocimiento de que el tubo, cuyo fin esa contener la contaminación del Santiago, al menos hasta pasar la zona de Juanacatlán y El Salto, colapsó por la presión del agua pluvial acumulada.
Recordó que los usos de suelo de los fraccionamientos La Azucena, Bonito Jalisco y Galaxia, fueron autorizados desde 1989, desde la administración de Jesús Romo Huerta, pero explicó que el sitio donde están esos fraccionamientos no es el problema.
Reconoció que el único nuevo fraccionamiento que desde el inicio presentó inundaciones fue el de Jardines del Castillo, construido por la empresa Arco; “por eso en mi administración nunca autorizamos la habitabilidad de ese lugar, porque está debajo del nivel del canal y había casas muy cerca de él”.
Moreno Alvarez aseguró que desde 1998 se autorizó el plan de construir cuatro mil 500 casas en la zona de la Cuenca de El Ahogado, por lo que a los alcaldes en turno sólo les ha tocado dar seguimiento a dicho proyecto.
Otro de los puntos álgidos de esta situación que derivó en la declaratoria de emergencia del gobierno del estado –refiere la ex funcionaria de El Salto– es la falta de coordinación entre las autoridades estatales y municipales, pues no trabajaron en conjunto para lograr que el agua que desfoga por el arroyo de El Ahogado se incorporara al cauce del río Santiago.
“Se llama El Ahogado porque el canal es más bajo que el río, y si el río sube de nivel el agua del canal se ahoga al chocar con la del río y se estanca. Debieron mantener bajo el nivel del río para que el canal desfogara bien”, señaló.
En su opinión, esta situación también ocurrió porque quien se encargaba del Agua en el municipio, Luís Alvarez, fue destituido a la llegada de la actual administración y en su lugar no se colocó a un especialista.
Finalmente, para terminar de hacer su deslinde, Moreno Alvarez recordó que en diciembre ganó la denuncia penal que los industriales de El Salto pusieron en su contra por supuesto abuso de autoridad y desacato a las leyes de uso de suelo.
Provocan filtraciones caída de techo
Ten cuidado con nuevas casitas
Bety Moreno batea la bolita de inundaciones
En mi administración tuve un trabajo perfecto, se ufana la ex gobernante de El Salto. Foto: Rafael del Río
Jaime Ramírez - PÚBLICO
Bertha Alicia Moreno, ex presidenta municipal del Salto se deslindó de cualquier responsabilidad por las irregularidades que han provocado inundaciones en cuando menos en dos fraccionamientos de ese municipio.
“No es mi culpa, el responsable es Joel González Díaz por no ponerse a trabajar. No debe echarle la bolita a nadie, debe ponerse a trabajar, a desazolvar, a crecer el bordo. Está castigando más a los fraccionamientos regulares que los irregulares”, dijo.
“El 65 por ciento del Salto es ejidal y la gente construye donde quiera, nadie los ha parado, no hemos podido con ellos, entonces hay construcciones aquí y construcciones allá, que obstruyen el paso natural del agua, el agua busca su cauce, ese es el problema, todas las construcciones irregulares que existen”.
En entrevista para Público, la ex munícipe dio respuesta a los señalamientos del actual presidente municipal saltense, Joel González Díaz que la hizo responsable directa por lo que sucede en los fraccionamientos de la Azucena y Jardines del Castillo, demás de haber autorizado la construcción de 40 mil viviendas.
Berta Alicia Moreno insiste en que durante su administración la única inundación que se registró fue en la Huizachera, problema que, dice, lo atendió inmediatamente, “cuando yo estuve en la presidencia municipal [2004-2006] nunca se inundaron estos fraccionamientos. El no trabajo del presidente (sic) actual, es lo que provoca todo. Pensó que el trabajo que realizó en mi administración iba a durar toda la vida”.
Y es que, precisa que durante su gestión municipal se hizo el bordo, que se encuentra al final del fraccionamiento la Azucena el cual medía dos metros, “pero nosotros lo elevamos hasta cinco metros en algunas partes y ensanchamos el canal (de la presa del Ahogado) para que recibiera mas agua y el actual presidente nunca le ha dado mantenimiento”.
Acerca de de los fraccionamientos más afectados, expone que éstos fueron autorizados durante la gestión del también priista Jesús Romo Huerta, en 1999, “a mi solo me tocó recibir algunas etapas de este desarrollo [la Azucena] en el aspecto de habitabilidad y estaba en regla todo, incluso los drenajes. Pero la etapa que está inundada no la recibimos. De Jardines del Castillo cuando entramos nosotros ya estaba recibidas dos y la tercera etapa del fraccionamiento no la recibí porque no cumplía con los requisitos”.
Afirma que los señalamientos de González Díaz obedecen a que “como trae el problema encima ahora quiere escudarse con mi nombre. Los fraccionamientos que yo autorice, como Parques del Castillo, no tienen ningún problema”.
Insiste en que el ella también tuvo problema de inundaciones, en la Huizachera y Jardines del Castillo, y afirma que por eso no recibió la tercera etapa de ese fraccionamiento “y no le estuve echando la culpa a nadie, hablamos con los fraccionadores y les pagaron su muebles a la personas. Eso fue en mi primer año, (se inundó) porque ya estaban muy azolvados todos los canales, por mi falta de inexperiencia (sic), porque se robaron tierra del bordo que era materia prima de los ladrilleros, eran un montón de cosas”.
Finalmente Bertha Alicia Moreno sostiene que en su gestión se hizo “un trabajo perfecto y en dos años El Salto nunca se inundó. Mi trabajo todavía le duró un año a González Díaz, yo creo que se a tuvo en que iba a durar toda la vida, no trabajó y ahí están las consecuencias”, concluye la ex presidenta municipal.
Acusaciones
Desde miércoles, cuando menos dos fraccionamientos ha resultado afectados seriamente por el temporal: Jardines del Castillo y la Azucena que es parte del desarrollo habitacional Galaxia Bonito Jalisco
En los dos lugares los niveles de agua han llegado hasta metro y medio de altura lo que ha obligado a que su habitantes sean evacuado y albergados en la Casa de Ejercicio Parroquial
Joel González, actual alcalde, tardo 40 horas en visitar las zonas afectadas para comenzar a revisar las probables soluciones al problema de las inundaciones
El actual alcalde (priista) declaró el jueves pasado que Bertha Alicia Moreno (panista) era la responsable de que hubiera inundaciones en los nuevos fraccionamientos
Lo que cabe en ocho metros cuadrados
Hamacas, ajedrez, día de campo, de todo hubo en la avenida. Foto: Rafael del Río
Patricia Martínez - PÚBLICO
En ocho metros cuadrados se puede hacer algo más que estacionar un auto. Por ejemplo, tender una manta en la sombra de un árbol y sentarse a jugar cartas, acoplar una sombrilla de playa en el asfalto y acomodarse para leer, jugar pelota, colocar una mesa y comer, desdoblar un camastro y tomar el sol. Esto se hizo ayer en un carril de avenida Chapultepec. Varios ciudadanos, unos de organismos civiles y otros no, comenzaron a ocupar un carril extremo con sus sets veraniegos: “Queremos dar el mensaje de que el espacio público puede usarse de otra forma”, dijo Mario Delgado, tendido en un sillón.
Chapultepec no se colapsó ni hubo respingos de los automovilistas. Dos ciclopolicías llegaron, vieron y decidieron irse, no había nada que reprenderles (el espacio público es de todos). Los que iban a pie decían: “¡Bien, bien, bien!”. Los automovilistas de los carriles contrarios observaban y asentían con la cabeza, se despistaban viendo la verbena, mientras corría la luz verde del semáforo.
“Últimos espacios disponibles”, decía un letrero clavado en una maceta. ¿Para qué sirve que hagan esto? “Para que la gente se pregunte qué hacen ahí. Este es el medio [ocupar el espacio público], la consecuencia es que se enteren que está prohibido estacionarse”, explica Antonio Vaca. El carril extremo de Chapultepec (norte-sur) es de circulación, sin embargo no se respeta y cualquier día de la semana hay coches estacionados, incuso en los pasos peatonales, sobre la banqueta e invadiendo rampas.
¿Entones quieren que se respete el carril para la circulación de los coches? “Simplemente que el espacio público se puede usar de otra manera. Ya de entrada el paisaje es diferente”, insiste Mario. A su lado, Ana Paola recuerda: “En ocho metros cuadrados se pueden hacer otras muchas cosas”.
Donde cabe un coche caben muchos escenarios. Esto cupo en una cuadra: 1) Tres amigos juegan basta sobre una sala improvisada con tapetes y una mesa de centro. 2) Tres amigos comen lonches que encargaron de la esquina. 3) Una pareja llegó con su hielera y una gran sombrilla de colores. 4) Un paraguas clavado a la parrilla de una bici les hace sombra a un grupo que juega lotería. 5) Un joven se mece en la hamaca que amarró entre dos árboles y junto a él dos chicas se acostaron sobre una colchoneta a ver fotos. 6) Un joven tendió un pedazo de pasto sintético, puso una maceta con flores, sobre un baúl un libro y se acostó a leer una revista. 7) El asesor de un político desenrolló una frazada en la sombra de un árbol y se puso a subrayar unos apuntes. 8) Una chica jugaba con una pelota. 9) Los autos estacionados en la banqueta de la librería del Fondo de Cultura Económica invadían todo el espacio público. 10) Dentro de una casa de campaña varias amigas chismeaban. 11) La mesa con galletas y jugo para todos. 12) Un grupo de ciclistas urbanos hablaban de un taller de vías ciclistas al que habían asistido en la mañana. 13) Dos amigos jugaban ajedrez. 14) Un coche estacionado. 15) Otro más, pero invadiendo el paso peatonal.
Era mediodía y la fila seguía creciendo. Esta vez fue mostrar lo que se puede hacer en ocho metros cuadrados, algo más ocurrirá.
Se realiza una consulta pública entre ciclistas
En el taller participaron más de 30 ciclistas. Foto: Rafael del Río
Patricia Martínez - PÚBLICO
Treinta ciclistas desconocidos se reunieron a hablar de cómo les va al pedalear en la ciudad. Ayer, fue el primer Taller de Consulta Pública sobre vías ciclistas, convocado por varios grupos de pedaleros preocupados porque su opinión sea considerada en los planes de movilidad de los gobiernos municipales y el estatal.
“Mientras el gobierno trabaja, tenemos que decirles ‘ésta es nuestra visión’, sugirió Xavier Treviño, asesor del Instituto para el Transporte y Desarrollo de Políticas (ITDP). El taller comenzó con una presentación de lo que todos ya saben: los beneficios de usar la bici y sus repercusiones. Por ejemplo, que 2 por ciento del Producto Interno Bruto de México es el costo de la congestión vehicular, o que otro 2 por ciento se podría ahorrar porque se evitarían enfermedades como diabetes, obesidad e infartos.
Las actividades estuvieron coordinadas por Xavier Treviño y grupos ciclistas como Gdl en Bici, Bici 10, Cámara Rodante, Bici-O, Pedalea y Colectivo Ecologista Jalisco. Días antes repartieron encuestas por toda la zona metropolitana e invitaban a los ciclistas a participar en el taller. Ayer, los que acudieron trazaron en un mapa los orígenes y destinos de sus viajes. Ahí comenzaron a soltar las ideas, los conflictos, las experiencias: “Creo que la conciencia se hace subiéndote a la bici”. “Primero debe darse preferencia a la necesidad, no van a hacer una ciclovía en Valle Real, ¿verdad?”. “Hay mucha gente que va en bici de madrugada a su trabajo y va sin luz, hay que hacer campañas de seguridad”.
De nueve a dos de la tarde dialogaron sobre los criterios para hacer vías ciclistas, coinciden en que no es prioritario hacer carriles exclusivos con infraestructura especial, para los que usan la bici, sino comenzar con acciones sencillas como señalar las rutas por donde la gente ya transita en bicicleta e incluso por calles que son aptas y sólo necesitan de reparación de pavimento y señalamiento que indique: “Por aquí van ciclistas”.
Los asistentes sugirieron que este taller de consulta pública se realice en los otros municipios de la zona metropolitana. Consideran que sus opiniones son el complemento al trabajo que algunos gobiernos, como el del Guadalajara y el del estado, a través del OCOIT, realizan. “Aunque hay propuestas de trazar ciclovías y un equipo técnico asesorando a los gobiernos, falta la voz de quienes andan todos los días en bicicleta, que son quienes tienen la experiencia real. La consulta pública es parte de un proceso en el que los ciclistas estamos interesados participar”, explicó Yeriel Salcedo, integrante de Gdl en Bici, uno de los grupos organizadores del taller.
Con este foro de consulta se abre un espacio para el diálogo entre ciclistas de la ciudad. La siguiente etapa será completar alrededor de mil encuestas entre los pedaleros de la zona metropolitana, las cuales servirán al ITDP, el grupo de técnicos asesores del ayuntamiento de Guadalajara, para armar los criterios para hacer vías ciclistas y, a la vez, trazarán una red de líneas de deseo, es decir, de las rutas más utilizadas por los ciclistas actuales.
Testimonios
Javier de la Torre
33 años, 10 de ciclista.
Origen/ Destino: de avenida Chapultepec al ITESO.
Tiempo: 30 minutos
Recorrido: Circula por López Mateos y antes de que se hicieran los pasos a desnivel pedaleaba por el carril central
Juan José Trujillo
45 años, y 30 de ciclista.
Origen/ Destino: de Huentitán a la zona industrial.
Tiempo: 30 minutos
Recorrido: Viaja por toda la calzada Independencia; al llegar a la zona de San Juan de Dios, el es conflictivo por falta de espacio