El río Marabasco, que divide a Jalisco y Colima
Juan Carlos G. Partida
Barra de Navidad, Jalisco, 17 de marzo.- En tanto autoridades estatales y municipales de Jalisco desestiman las diferencias por el problema limítrofe con Colima y sólo se quejan de la supuesta beligerancia del gobierno vecino, en El Rebalse apareció la semana pasada un anuncio espectacular a pie de carretera en el que se detalla que ese territorio pertenece a Colima, el cual es resguardado por patrullas de esa misma entidad, mientras la obra de introducción de agua potable está detenida. En la sierra también la presencia de patrullas colimenses en las colindancias, específicamente en El Platanar y Las Pesadas, ha promovido el aumento de tensiones con los lugareños.
“La Culebra en Manzanillo, Colima”, reza el enorme espectacular que además contiene el logotipo oficial del gobierno del estado vecino, instalado a menos de 50 metros de donde hace unas semanas debieron suspenderse las obras de introducción de agua potable hacia esa comunidad debido precisamente a encontrarse en territorio en litigio. Además, patrullas estatales resguardan la zona permanentemente, lo que ha aumentado el malestar de los habitantes, autoridades municipales e incluso estatales, un anticipo de la nueva tensión que se suscitará en los próximos días.
Fernando Guzmán Pérez Peláez, secretario de Gobierno, aunque conocedor del tema, prefirió no ahondar este lunes durante la gira que realizaron varios miembros del gabinete y el gobernador Emilio González Márquez por este municipio de Cihuatlán. Dijo que próximamente se tomarían decisiones, pero no detalló cuáles.
Lo mismo sucedió con el alcalde priísta de Cihuatlán, Enrique González Gómez, quien prefirió evitar hablar sobre el conflicto limítrofe porque según él prefería que en los medios de comunicación se destacaran los actos oficiales de arrecifes artificiales y entrega de obra pública que encabezó el gobernador.
En cambio, el regidor priísta Carlos Salas Sánchez, integrante de la Comisión de Límites en Cihuatlán y quien forma parte de un grupo de seis ediles inconformes con la administración de González Gómez (a quien señalan además de no haber utilizado claramente recursos estatales para diversos proyectos), tronó contra lo que calificó “una intromisión más del estado de Colima”.
“Tenemos entendido que después de una reunión con Francisco Ramírez Acuña (ex secretario de Gobernación), se hizo una tregua donde se dijo que nadie iba a hacer ese tipo de obras. Nos extraña, porque la Policía Federal Preventiva (PFP) no ha tomado cartas en el asunto, que se supone que están a cargo de la zona (pero) prácticamente ya no están los elementos de la PFP, existe el orden pero ya no vemos policías federales en la zona; lo que sí se puede ver son los elementos de la policía de Colima”, dijo.
El alcalde de Cuautitlán, el municipio de la serranía jalisciense en conflicto por 209 kilómetros cuadrados de ricas vetas minerales y forestales con Colima, tampoco eludió el tema, y entrevistado en el marco de la gira del gobernador a este puerto dijo que la postura del gobierno jalisciense ha sido “muy pasiva”.
“Nosotros no hemos construido absolutamente nada de obra pública pero sí lo ha hecho Colima; en la comunidad de El Platanar construyeron ya un aula para preescolar, un anexo a una capilla y están en proceso de construcción de una casa de salud”, dijo.
Señaló que esas situaciones deben ya de hacer reaccionar al gobierno estatal, con base en lo jurídico, “porque esto también ha permitido que los medios de comunicación de Colima digan que esa zona en conflicto es de ellos, porque han asistido a la construcción de obras y Jalisco no ha hecho nada para detenerlos”. Detalló además que sí se requiere vigilancia de la policía jalisciense, pues únicamente hay patrullaje neutral de parte de la PFJ en Plan de Méndez, pero en El Platanar y Las Pesadas quienes están a cargo de la vigilancia son unidades de la policía vecina.