martes, 18 de marzo de 2008

Colima vuelve a la beligerancia; coloca un anuncio para proclamar posesión de El Rebalse

En El Platanar y Las Pesadas, malestar ciudadano, podría haber un nuevo enfrentamiento


El río Marabasco, que divide a Jalisco y Colima

Juan Carlos G. Partida


Barra de Navidad, Jalisco, 17 de marzo.- En tanto autoridades estatales y municipales de Jalisco desestiman las diferencias por el problema limítrofe con Colima y sólo se quejan de la supuesta beligerancia del gobierno vecino, en El Rebalse apareció la semana pasada un anuncio espectacular a pie de carretera en el que se detalla que ese territorio pertenece a Colima, el cual es resguardado por patrullas de esa misma entidad, mientras la obra de introducción de agua potable está detenida. En la sierra también la presencia de patrullas colimenses en las colindancias, específicamente en El Platanar y Las Pesadas, ha promovido el aumento de tensiones con los lugareños.

“La Culebra en Manzanillo, Colima”, reza el enorme espectacular que además contiene el logotipo oficial del gobierno del estado vecino, instalado a menos de 50 metros de donde hace unas semanas debieron suspenderse las obras de introducción de agua potable hacia esa comunidad debido precisamente a encontrarse en territorio en litigio. Además, patrullas estatales resguardan la zona permanentemente, lo que ha aumentado el malestar de los habitantes, autoridades municipales e incluso estatales, un anticipo de la nueva tensión que se suscitará en los próximos días.

Fernando Guzmán Pérez Peláez, secretario de Gobierno, aunque conocedor del tema, prefirió no ahondar este lunes durante la gira que realizaron varios miembros del gabinete y el gobernador Emilio González Márquez por este municipio de Cihuatlán. Dijo que próximamente se tomarían decisiones, pero no detalló cuáles.

Lo mismo sucedió con el alcalde priísta de Cihuatlán, Enrique González Gómez, quien prefirió evitar hablar sobre el conflicto limítrofe porque según él prefería que en los medios de comunicación se destacaran los actos oficiales de arrecifes artificiales y entrega de obra pública que encabezó el gobernador.

En cambio, el regidor priísta Carlos Salas Sánchez, integrante de la Comisión de Límites en Cihuatlán y quien forma parte de un grupo de seis ediles inconformes con la administración de González Gómez (a quien señalan además de no haber utilizado claramente recursos estatales para diversos proyectos), tronó contra lo que calificó “una intromisión más del estado de Colima”.

“Tenemos entendido que después de una reunión con Francisco Ramírez Acuña (ex secretario de Gobernación), se hizo una tregua donde se dijo que nadie iba a hacer ese tipo de obras. Nos extraña, porque la Policía Federal Preventiva (PFP) no ha tomado cartas en el asunto, que se supone que están a cargo de la zona (pero) prácticamente ya no están los elementos de la PFP, existe el orden pero ya no vemos policías federales en la zona; lo que sí se puede ver son los elementos de la policía de Colima”, dijo.

El alcalde de Cuautitlán, el municipio de la serranía jalisciense en conflicto por 209 kilómetros cuadrados de ricas vetas minerales y forestales con Colima, tampoco eludió el tema, y entrevistado en el marco de la gira del gobernador a este puerto dijo que la postura del gobierno jalisciense ha sido “muy pasiva”.

“Nosotros no hemos construido absolutamente nada de obra pública pero sí lo ha hecho Colima; en la comunidad de El Platanar construyeron ya un aula para preescolar, un anexo a una capilla y están en proceso de construcción de una casa de salud”, dijo.

Señaló que esas situaciones deben ya de hacer reaccionar al gobierno estatal, con base en lo jurídico, “porque esto también ha permitido que los medios de comunicación de Colima digan que esa zona en conflicto es de ellos, porque han asistido a la construcción de obras y Jalisco no ha hecho nada para detenerlos”. Detalló además que sí se requiere vigilancia de la policía jalisciense, pues únicamente hay patrullaje neutral de parte de la PFJ en Plan de Méndez, pero en El Platanar y Las Pesadas quienes están a cargo de la vigilancia son unidades de la policía vecina.

Policías tapatíos darán apoyo contra las podas clandestinas


Las autoridades tapatías buscarán meter en cintura a quienes podan árboles sin autorización, lo que cada vez es más común, reconocen. Foto: Marco A. Vargas.

El director de Ecología vincula la mutilación de árboles con espectaculares.

Dolores Reséndiz - PÚBLICO

La carga de trabajo que se vive en el área de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Guadalajara y la insuficiencia de personal para supervisar los camellones y áreas verdes de la ciudad, dejan espacio libre a quienes sin permiso podan o arrancan árboles con vida, reconocieron las autoridades tapatías, que solicitaron apoyo de la policía para evitar que la ciudad siga perdiendo su cubierta verde.

El director de Ecología en el municipio, Francisco Javier Ochoa Covarrubias, reconoce que este año no ha sido el mejor para los árboles tapatíos, ya que durante los últimos meses ha ido en aumento el descubrimiento de podas clandestinas en la ciudad.

¿Quiénes y por qué lo hacen? El funcionario responde que no se atreve a responsabilizar a nadie porque hasta hoy, el personal del área a su cargo no ha encontrado a ningún cortador de árboles en flagrancia.

Por ello, el director de Ecología informó que acordaron con la Policía de Guadalajara que se instruya a los oficiales para que en sus patrullajes soliciten a quienes encuentren haciendo una poda o derribo, el permiso municipal para ello. De no contar con el aval del ayuntamiento, se detendrá al infractor. Luego, los gendarmes procederán a llamará a los peritos de inspección ambiental para que evalúen el daño y determinen la sanción respectiva.

Para el funcionario de Guadalajara, hay evidencias de que detrás de algunas de las podas clandestinas se esconden intereses de propietarios de anuncios espectaculares.

Como ejemplo, Ochoa Covarrubias señaló dos puntos en los que la poda clandestina benefició la vista para este tipo de anuncios publicitarios, lo que supone la responsabilidad de los propietarios: “Nosotros no hemos autorizado ninguna poda para que luzcan los espectaculares. Hace tres semanas vimos sobre [la avenida] Lázaro Cárdenas, por el rumbo de la clínica del Seguro Social, y nos encontramos que alguien por la noche hizo una poda. Lo que suponemos es que fueron los dueños de los espectaculares”. Uno caso similar se puede observar en la glorieta de La Normal, agregó.

El funcionario admitió que la poda sin autorización es un problema no sólo de territorio tapatío, sino de la zona metropolitana de Guadalajara en general.

A la Dirección de Parques y Jardines, dependiente del área de Ecología, han llegado hasta 800 peticiones en un solo mes para autorizar podas o derribo de árboles.

El cúmulo de trabajo, que supera la capacidad de la dependencia, obliga a los interesados a contratar el servicio particular del retiro o corte de los árboles, reconoce el funcionario municipal.

Sin embargo, este trámite se legaliza únicamente con la entrega de un dictamen elaborado por la Dirección de Inspección Ambiental que determine la factibilidad de podar o retirar la especie en cuestión.

Los interesados en obtener un permiso para el derribo de un árbol deberán acudir a la Dirección de Parques y Jardines para que los peritos lleven a cabo un dictamen para resolver si procede o no la intención.

Una vez que se obtiene el dictamen a favor, el particular deberá esperar el turno de una lista que puede ser de hasta 800 peticiones.

El costo por las podas que realiza el personal del ayuntamiento van de los 337 a los 1,238 pesos. Por el derribo, el costo es desde 863 hasta 1,724 pesos.

Cualquier persona debería contar con el dictamen a favor para realizar el servicio, aunque contrate a un particular. Sin embargo, este trámite es olvidado por muchos, reconoce Ochoa Covarrubias.

Añade que de un día para otro han amanecido con áreas “pelonas” de árboles en zonas donde ni siquiera se solicitó la elaboración del dictamen técnico.

Casos especiales

• La llegada de aire con mayor intensidad en la ciudad pone al descubierto la debilidad de árboles viejos o descuidados. la Dirección de Ecología en Guadalajara atenderá de manera inmediata las peticiones ciudadanas que consideren que un árbol pone en riesgo el paso peatonal o viviendas de la zona para proceder a su retiro o poda.

Los interesados pueden llamar al 070 y exponer la gravedad de la situación para que los peritos den prioridad al caso.

Este trámite no requiere pago por el dictamen de peritos ni el costo de la poda o derribo.