No se han pagado las indemnizaciones a los ejidatarios afectados.
Pedro Silva - PÚBLICO
Ya empezaron los trabajos de construcción de la presa El Naranjo, en el río Marabasco, que divide los estados de Colima y Jalisco, donde se invertirán poco más de 1,100 millones de pesos.
Se prevé que se demorará tres años para finalizar su construcción, si es que no se presentan contratiempos debido a desbordamientos del caudal provocados por algún huracán o tormenta tropical.
En esta “época de secas”, los primeros trabajos están relacionados con un vertedor de agua entre los cerros, así como el camino principal de acceso. Todavía no empiezan la construcción de la cortina principal.
A la fecha, ejidatarios de la comunidad de Peñitas y Truchas, del municipio de Cihuatlán, Jalisco, aún esperan el pago de indemnizaciones de los terrenos que se verán afectados.
De igual manera han solicitado a las autoridades municipales su intervención para frenar a representantes sindicales de la CTM, apoyados por el dirigente Rafael Yerena, que pretenden apropiarse de los “comedores” y “permisos de taxis”.
Al respecto, Juan Manuel Espinoza Grajeda, representante sindical, aclaró que la orden de Yerena (CTM) “es que se beneficien primeramente las personas de las comunidades ejidales del área en que se construye la presa, igualmente la población de Cihuatlán”.
Conforme transcurren los días, aumenta la afluencia de trabajadores y maquinaria en la zona, así como la preocupación por viviendas, talleres, farmacias y otros servicios básicos en la zona, entre ellos, la seguridad pública.
La presa El Naranjo se establecerá en el río Marabasco y permitirá contener avenidas extraordinarias del caudaloso río, así como entregar agua potable a localidades de ambas entidades y, sobre todo, irrigar alrededor de siete mil hectáreas de ambas márgenes del río que divide a Jalisco y Colima.
La presa tendrá una capacidad de almacenamiento de 135 millones de metros cúbicos de agua, y su cortina tendrá una longitud de 56 metros lineales y una altura de 85 metros.
CEDHJ retrata pésima situación
(Público)
• La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco (CEDHJ) emitió un extenso informe al Congreso del Estado, en el que le advierte de la grave situación que viven las comunidades de la zona limítrofe entre Jalisco y Colima, donde, en el contexto del conflicto entre ambas entidades, se violan derechos básicos de los vecinos, que sufren falta de servicios e infraestructura, problemas de trabajo y salud, acoso de cuerpos militares y de policía —intimidación, lesiones y cateos ilegales—, y un estado general de división y ausencia de orden jurídico y paz. “No se ha valorado la magnitud del problema”, advierte, y hace nueve propuestas, entre ellas que se impulse un diálogo con legisladores de Colima y se exhorte al Senado a que actúe pronto o decline su competencia.
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