La versión de la Sedeur de que los ciclistas circularían por la banqueta fue desautorizada por las dependencias encargadas del transporte urbano.
Patricia Martínez - Ignacio Pérez Vega - PÚBLICO
Quince centímetros es lo que mide el machuelo de una banqueta, o sea la orilla. Quince centímetros es lo que se necesitaría para completar el espacio para las ciclovías de la calzada Independencia. Y es posible que esos quince centímetros sí los ganen los ciclistas, pues contra lo que indicó la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur), aún no está dicha la última palabra en cuanto a por dónde circularán éstos por la céntrica avenida.
La Secretaría de Vialidad y Transporte (SVT) comenzó ayer un estudio para ver las posibilidades de redistribuir el espacio en dicha vía; consideran que podría reducirse un poco uno de los dos carriles para vehículos y tomar de quince a 20 centímetros de la banqueta: así completarían los 1.50 metros que se requieren de cada lado para trazar la ciclovía.
José de Jesús Mejía Mendoza, director de Infraestructura Vial de la SVT, dijo que inicialmente habían enviado un dictamen a la Sedeur, donde le informaban que no se podía reducir a menos de 3.25 metros el ancho de los carriles vehiculares. Por eso, decidieron que la ciclovía iría por la banqueta. Aunque el acuerdo contradice todos los argumentos técnicos; por ejemplo, que la ciclovía no debe ir por la acera porque provocaría conflictos con los peatones porque es la entrada y salida de centros comerciales, oficinas, una estación de Tren Ligero, entre otros servicios.
Sin embargo, después de que José Manuel Verdín Díaz, titular de Vialidad, dio un paseo en bici para recorrer la avenida 8 de Julio —otra de las propuestas para trazar vías ciclistas—, una de sus primeras declaraciones fue que estudiarían las posibilidades de redistribuir los carriles para los vehículos. Además de 8 de Julio, desde ayer analizan las opciones en la calzada Independencia.
Por su parte, abordado por separado, el director del Sistema de Tren Eléctrico Urbano (Siteur), Diego Monraz Villaseñor, también coincidió con la SVT, en el sentido de que aún no está dicha la última palabra sobre si la ciclovía en la Calzada irá sobre la banqueta o como un carril más en el arroyo de la vía. “No hay una definición todavía sobre las especificaciones que deberá tener esta ciclovía, lo estamos tratando de ver con mucho cuidado, conciliando las diferentes opiniones o posturas, que parecería menor pero que sí puede representar una situación como referencia para futuras intervenciones urbanas”, explicó.
Monraz Villaseñor adelantó que esta semana y la próxima tendrán reuniones de trabajo entre el Colectivo Ecologista Jalisco (CEJ), Guadalajara 2020, el Instituto para el Transporte y Desarrollo de Políticas (ITDP) y con el experto Guillermo Peñalosa, quienes trabajarán en una solución al problema, en coordinación con autoridades estatales.
Por ello, el titular del proyecto de movilidad del gobierno estatal desautorizó lo dicho por Manuel Becerra Arthur, encargado de proyectos en la Sedeur, quien afirmó que la ciclovía en la calzada Independencia iría por la banqueta (Público, 19 de mayo de 2008).
“Hoy todavía no hay una decisión tomada. El jueves pasado acordamos con los alcaldes de la zona metropolitana [de Guadalajara] tener esta serie de reuniones y ahora sí ya tener una definición absoluta”, señaló el entrevistado, quien agregó que ir por banqueta “tiene sus ventajas” e ir por el arroyo vehicular “tiene otras”.
Por ello, dijo que se tomará la mejor opción, “sin apasionamientos” y sin tomar decisiones unilaterales.
Hasta ahora las razones para no reducir el ancho de un par de carriles de 3.25 a tres metros, como proponen los especialistas en vías ciclistas, es que por la Calzada también transitan vehículos grandes, como los repartidores de agua, los de la basura, el gas o las grúas. La norma oficial mexicana (NOM) en la materia indica que estos vehículos no deben medir más de 2.60 m de ancho, pero la SVT argumenta que, con sus dimensiones, el problema sería al dar vuelta, pues necesitan espacio para maniobrar, explica Mejía Mendoza. Una alternativa para solucionarlo sería dejar el carril de la extrema derecha más ancho. Eso no cambia que se le resten de quince a 20 centímetros a los cinco metros de ancho que recuperarán para las banquetas.
¿Cuál es la posición de la Secretaría de Vialidad respecto a recuperar espacios para peatones y ciclistas? “Creo que es conveniente iniciar el cambio de mentalidad; hay que ver hasta dónde, para que haya seguridad para todos”, dijo Jesús Mejía.
Hoy, por la calzada Independencia, en hora pico, circulan alrededor de cinco mil vehículos en ambos sentidos. Con la reducción de un carril (para dar cabida al Macrobús, la ciclovía y ampliar un poco la banqueta), pretenden que la velocidad disminuya a 50 kilómetros en hora valle; ahora transitan a 60 kilómetros por hora, o más.
Los resultados del estudio estarán el jueves próximo. Entonces se sentarán a dialogar sobre el futuro de las vías ciclistas la SVT y el Ayuntamiento de Guadalajara, los encargados de construirlas.
Encuesta a posibles usuarios
• A partir de hoy, el Ayuntamiento de Guadalajara comenzó a aplicar encuestas entre los ciclistas que transitan por la avenida 8 de Julio. El proceso de consulta continuará hasta el viernes y se realizará en distintos puntos de la avenida; seguirán por la zona industrial, luego el Centro y al final la zona del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad de Guadalajara. La encuesta serán diez preguntas que servirán para tener un diagnóstico de los usos y costumbres de los ciclistas que transitan por 8 de Julio: la mayoría la usa para trasladarse a su trabajo; la mayoría son hombres.
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