sábado, 5 de julio de 2008

Sedeur ingenia proceso para meter tubos al túnel


Por el momento se instalan los tubos que van a la salida del túnel. Foto: Marco A. Vargas

Ignacio Pérez Vega - PÚBLICO

Meter los tubos bajo el túnel de López Mateos y Las Rosas significa un reto para la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur), que ya no descarta un eventual retraso en los trabajos ante las complicaciones que implica trabajar en un espacio de baja altura.

Tal y como lo habían previsto ingenieros consultados por este diario, la altura de 4.70 metros del túnel hará muy difíciles las maniobras para colocar cada tubo en la zanja que va al centro de los carriles y así renovar el colector fracturado, pues no pueden maniobrar libremente las máquinas adecuadas para ello, grúas y retroexcavadoras entre ellas. Ante ello, el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Jalisco, José Luis Brenez Moreno, había dicho que una posible solución era armar una estructura de rieles para mover los pesados tubos, cuyo peso calculó entre tres y seis toneladas (Público, 1 de julio de 2008).

Meter los tubos bajo el túnel de López Mateos y Las Rosas significa un reto para la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur), que ya no descarta un eventual retraso en los trabajos ante las complicaciones que implica trabajar en un espacio de baja altura.

Tal y como lo habían previsto ingenieros consultados por este diario, la altura de 4.70 metros del túnel hará muy difíciles las maniobras para colocar cada tubo en la zanja que va al centro de los carriles y así renovar el colector fracturado, pues no pueden maniobrar libremente las máquinas adecuadas para ello, grúas y retroexcavadoras entre ellas. Ante ello, el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Jalisco, José Luis Brenez Moreno, había dicho que una posible solución era armar una estructura de rieles para mover los pesados tubos, cuyo peso calculó entre tres y seis toneladas (Público, 1 de julio de 2008).

El secretario de Desarrollo Urbano, Sergio Carmona Ruvalcaba, explicó que luego de estudiar varias posibilidades, se decidieron por acoplar una grúa viajera a un camión tipo trailer, que colocará cada tubo en su sitio.

Poner cada tubo de 1.52 metros en el colector implicará una tarea de entre tres y cuatro horas, señaló el funcionario (ver gráfico).

La solución que encontró la Sedeur, aseveró su titular, no encarecerá el costo de la obra, calculada en 50 millones de pesos: “Todo lo que se está haciendo forma parte de lo que se calculó. Esperemos que el porcentaje de imprevistos nos permita sortear esa dificultad, sabíamos que no iba a ser fácil”.

Abordado en su oficina ubicada en el segundo piso del edificio de la Sedeur, Carmona Ruvalcaba reconoció por primera vez que pudiera presentarse algún retraso en la conclusión de los trabajos.

Días después del 10 de junio, cuando el colector se colapsó y el túnel vehicular sufrió una inundación de dos metros, el titular de la Sedeur afirmó que el plazo para reparar el colector sería de entre dos y medio y tres meses.

“Sí. Sí estamos sujetos a que el tiempo se extienda. Esto pudiera suceder. No le estoy apostando a ello. Soy optimista y además soy muy ‘cuchillo de palo’, estoy sobre de ellos [las constructoras] para que la gente no entregue las cosas cuando sea o que no trabajen en las jornadas para emparejar los retrasos”.

Por ejemplo, una dificultad que ya ocurrió es que los proveedores enviaron los primeros 36 tubos de 1.52 metros de diámetro. Sin embargo, cuatro de ellos llegaron dañados y serán devueltos sin costo para el gobierno estatal.

El funcionario indicó que le preocupa que el procedimiento de colocación de los tubos funcione, pero también le inquieta que los tubos se están fabricando en este momento y pudiera haber algún atraso en la entrega: “Queremos quedar bien, pero quedar bien significa salir en tiempo y hacerlo con calidad y con responsabilidad. Si eso nos lleva más tiempo, no quedaremos bien, pero sí quedaremos con la conciencia tranquila. No le estoy apostando a ello. No me estoy curando en salud”.

Renovar 350 metros del colector de López Mateos implica la adquisición y colocación de 314 tubos de 1.52 metros de diámetro para los colectores auxiliares y otros 157 tubos de 2.44 metros para el central. En total, se requieren 417 piezas que vienen de Aguascalientes y de Morelos.

Los trabajos de reconstrucción del colector los realizan las constructoras Aldsanmb (por la parte norte del túnel) y Casgo (por la sur), a las que se asignó en forma directa la obra ante la urgencia para reparar el colector. Tal eventualidad está prevista por la Ley de Obra Pública, señaló el secretario estatal.

Colector seguro

Para que el nuevo colector esté seguro y sin riesgo de que se presenten fisuras otra vez, la Sedeur dio a conocer que se lleva a cabo un proceso conocido técnicamente como acostillado.

El acostillado no es otra cosa que hacer un “empaque” a la tubería. Primero se coloca una cama de grava, sobre ésta lleva una plantilla de superficie lisa y encima se coloca el tubo. A su vez, éste es fijado con mortero fluido (mezcla de cemento) dentro de una “caja” lo que hace que, pese a la presión que ejerza el agua que irá por el colector, no habrá desplazamientos del ducto, lo que sí ocurrió con el viejo, que data de 1965 y se fracturó tras que se removió la cubierta de cinco metros de tierra que tenía para construir el paso a desnivel en López Mateos y Las Rosas.

Carmona Ruvalcaba indicó que incluso la cama de grava permite una medida adicional de seguridad ante un eventual escurrimiento de agua que pueda presentarse por las paredes del túnel, pues ese material permite la filtración al subsuelo. Además, el tubo es de concreto preforzado, lo cual soporta los empujes del líquido.

Las tareas descritas cuentan con el aval del Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA). “Estamos elaborando las actas y todo el proyecto se pasa al organismo para que nos lo valide. Hay actas donde se acepta el procedimiento”, dijo el informante.

No hay comentarios.: