Juan Carlos G. Partida - LA JORNADA JALISCO
El alcalde de Cuautitlán de García Barragán, municipio al sur de Jalisco, donde se asientan varios pueblos nahuas, incluido el ejido de Ayotitlán, envió este fin de semana policías municipales a resguardar la mina Los Juanes, cuya maquinaria y operación fue parada en enero por indígenas inconformes con la explotación de metales preciosos que se hace de sus tierras con total impunidad y con secuelas ecológicas.
La acción del munícipe panista Gerardo Palacios Campos permitió la reanudación de labores de la empresa que pertenece a un inversionista chino y se hizo a pesar de que existe un amparo obtenido por los indígenas desde enero pasado para que no se explote más el yacimiento de oro y plata, en tanto siga sin solucionarse el problema territorial que tiene decenios entrampado en la Secretaría de la Reforma Agraria.
Ejidatarios de Ayotitlán encabezados por Lino Roblada, miembro del Consejo de Mayores, lograron desde el 16 de enero una suspensión en el Juzgado Primero en Materia Administrativa del estado de Jalisco. La suspensión se otorgó contra las acciones y autorizaciones que permitieron la explotación de un predio dentro del ejido junto al río Marías, e involucra a la Secretaría de Economía, la Coordinación General de Minas, Promoción Minera, Cartografía y Concesiones Mineras, el Registro Público de Minas y Derechos Mineros, al delegado de Economía en Jalisco, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Subsecretaría de Gestión para la Protección Ambiental, la Dirección de Gestión Forestal y Suelos, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, el Ayuntamiento de Cuautitlán y su alcalde, Palacios Campos, entre otros.
De acuerdo con el reporte en Ayotitlán, uniformados de la policía municipal de Cuautitlán arribaron el fin de semana al predio en disputa y donde se asienta la minera, a la cual los nahuas, desesperados ante la inacción oficial, decidieron bloquear e inmovilizar maquinaria desde enero pasado, una vez que tuvieron la suspensión legal en su poder.
Los indígenas retuvieron un camión de volteo y dos camionetas como garantía para que la empresa pagara los daños causados a la zona; miembros de la Unidad de Apoyo a Comunidades Indígenas (UACI) de la Universidad de Guadalajara, que asesora a la comunidad de Ayotitlán, han señalado que la empresa minera es propiedad de un empresario chino a través de prestanombres.
Aunque no se localizó al alcalde de Cuautitlán, es un hecho que las autoridades esgrimen que la Secretaría de Economía otorgó en 1997 una concesión a Juan Catarino Michel Victoria y Juan Enrique Michel Arámbula, conocidos como Los Juanes, para la explotación minera en 25 hectáreas en territorio nahua. Esa concesión fue avalada el 10 de febrero en una asamblea realizada en Ayotitlán y a cargo del comisariado ejidal, Jesús Michel Prudencio, quien por cierto fue desconocido como representante por los indígenas luego de que también promovieron e hicieron prosperar una demanda legal en su contra.
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