Negocian decreto de protección con San Cristóbal de la Barranca

Agustín del Castillo - PÚBLICO La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), de la secretaría federal del Medio Ambiente, intenta convencer a la Administración municipal de San Cristóbal de la Barranca de que apoye el decreto de área de protección de recursos naturales que el gobierno federal impulsa para los cañones de los ríos Santiago y Verde, tras la preocupación que hizo pública el ayuntamiento de que el régimen de protección impediría el desarrollo económico en la depauperada región, informó el comisionado nacional, Ernesto Enkerlin Hoeflich. En entrevista telefónica, el funcionario puso en relieve que se pretende sacar adelante la publicación del decreto a fines del año en curso, lo que a su juicio demuestra el compromiso con la sustentabilidad de la región metropolitana de Guadalajara. La reserva se extendería sobre más de 56,700 hectáreas; de ellas, cerca de diez mil corresponden a San Cristóbal de la Barranca, una olvidada demarcación cuya economía y vida social fue severamente dañada cuando Guadalajara contaminó el río Santiago, a partir de los años ochenta del siglo XX. Esto motivó una verdadera diáspora de sus habitantes hacia distintos destinos de Estados Unidos y la propia Guadalajara. El municipio ha mantenido su población sin crecimiento real los últimos 20 años. La contaminación de las aguas ha dado al traste con su agricultura ribereña, ha limitado su fruticultura y su ganadería y ha desplazado poblados completos que vivían de la pesca. “Queremos convencerlos de que la creación de un área protegida es una gran oportunidad de acceder a recursos para el desarrollo […] Un decreto de este tipo ayuda además a gestionar la mejora de las condiciones ambientales, pues justo de eso se trata un modelo de área natural protegida, de restaurar y de conservar”, añadió Enkerlin. En realidad, San Cristóbal ha estado inserta en las gestiones de protección ambiental de la zona desde hace unos cinco años, invitada por su homólogo ayuntamiento de Zapopan, pero los cambios de gobierno han hecho fluctuar su aprobación, ante la tardanza de la publicación del decreto. Originalmente, el área de protección sólo incluía los municipios aguas abajo de la futura cortina de Arcediano (Zapopan, Ixtlahuacán del Río y San Cristóbal), pero la necesidad de proteger la cuenca alta de la presa llevó a incluir el río Verde hasta Los Altos de Jalisco.