Sí hay deseo de drenar Cajititlán

Sergio Blanco - PÚBLICO El alcalde de Tlajomulco, Antonio Tatengo Ureña, reconoció que sí existe la intención de extraer agua de la laguna de Cajititlán por parte del fraccionador Antonio Sánchez Ramírez, propietario de los cotos Tres Reyes y la Noria, construidos dentro de la laguna de Cajititlán en tiempos de secas y ahora inundados por el excelente nivel de agua que trajo el temporal 2008. El alcalde señaló al presunto responsable del intento de apertura del canal de El Tajo para drenar la laguna: “N’hombre, yo qué tengo qué ver con ese señor [Antonio Sánchez], yo no tengo ninguna relación, más bien por ahí el presidente de los pescadores [Mario Morales] es el que estuvo de acuerdo con él y estuvo de acuerdo en que le sacaran agua, porque estaba perjudicando a su fraccionamiento y era su trabajador de él, o sea […] trabajaba para los intereses de ese señor”. En entrevista realizada hace unos días, Tatengo declaró que el mismo presidente de la Unión de Pescadores trató de deslindarse del asunto: “Él [Mario Morales] estaba interesado desde antes en eso, pero ahora cuando ya se vio acorralado por la gente de Cajititlán, ahora ya salió ahí y dijo, ‘No pos aquí digo a la opinión pública, me están diciendo que yo estaba involucrado con algunas gentes [sic] para sacarle el agua pero yo nunca dije que le voy a sacar el agua’ [...]. Por ahí hay rumores de que él es empleado de ese señor y estaba de acuerdo en que le sacaran agua”. Según Eugenio García Barajas, director de comunicación social de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), no hay duda de que los fraccionamientos Tres Reyes y La Noria se construyeron en clara violación a la Ley de Aguas Nacionales: “Ahora que la laguna de Cajititlán está a 92 por ciento de su capacidad, pues ahí es la mejor prueba que están invadiendo la zona federal”. A su vez, deslindó a la dependencia federal al explicar que la Conagua no puede expedir permisos para construcción permanente dentro del vaso, ya que modificarían el régimen hidráulico: “Ellos [los invasores], en la laguna de Cajititlán, así como en el lago de Chapala, lo han hecho de manera irregular”. A pesar de que la Conagua reconoció la ilegalidad de los fraccionamientos, García Barajas declaró que la representación en Jalisco de la dependencia no está en condiciones de emitir sanciones, toda vez que se requiere actualizar la delimitación de la zona federal a partir del nivel de agua máximo ordinario y que “para esto se requieren recursos, se requiere personal, y precisamente eso hemos estado solicitando a la oficina central de la Conagua para llevar a cabo esta acción, pero definitivamente estas personas actuaron de una manera irregular”. El compromiso del municipio para con sus habitantes también es débil, pues se le cuestionó a Tatengo sobre si respaldará a la población que no quiere permitir que drenen la laguna que llevaba años de mala recuperación, a lo que respondió: “Yo voy a respaldar el saneamiento, yo voy a respaldar que todos los sectores estén bien, eso es lo que yo voy a respaldar”.